Los jubilados Belarusos envían una señal SOS a la comunidad mundial 

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Los resultados de las elecciones presidenciales del 9 de agosto de 2020 fueron manipulados. Como resultado, varios grupos de la sociedad, desde jubilados hasta personas discapacitadas, salieron a las manifestaciones de protesta masivas. Las autoridades respondieron con represiones que fueron increíbles en su crueldad.

Somos jubilados. No queremos gobernar a nadie. No queremos conquistar a nadie. Queremos ayudar a cada uno en nuestro país a que se de cuenta de la desmadre total del gobierno actual. Por eso, salimos a las protestas pacíficas a partir del 5 de octubre de 2020. Para que cada uno de nosotros, incluso sea cómplice del régimen, entienda que Él es una Persona con derecho a elegir.

 “El hijo de un hombre fue golpeado y mutilado por la policía antidisturbios el 9 de agosto. Ahora sale el padre en lugar del hijo”, dice la participante de la marcha.

"A mi mejor alumno por el cartel "¡Estoy contra la violencia!" agredieron cuatro policías. En resultado, tiene contusiones en los riñones. Salgo en su lugar”, dice la profesora.

 “Mi hijo no regresó del trabajo el 10 de agosto. Desapareció. Al tercer día lo trajeron los voluntarios, tenía las piernas rotas. ¿Cómo puedo tragarme esto?"

 El 12 de octubre de 2020, durante la dispersión de la marcha de los jubilados en Minsk, las fuerzas de seguridad utilizaron cartuchos de ruido "Osa" y gas lacrimógeno. 

 “Me costaba respirar. Llamamos una ambulancia para una mujer. Mi cara ardía hasta la noche”, escribió una jubilada de 69 años. 

La reacción de las autoridades endurecía cada lunes. Las detenciones aumentaban. ¡Pero no podíamos permanecer indiferentes a lo que estaba ocurriendo en el país, a que estaban agrediendo a nuestros hijos y nietos!

 Larysa Sous, de 79 años, sobreviviente del Holocausto, fue detenida el 6 de diciembre. Se lanzó a proteger a un joven que fue arrastrado por la policía antidisturbios. "¡Llévenme a mí en su lugar!", gritó la mujer. A ambos se los llevaron a la comisaría de policía del distrito Kastrychnitsky de Minsk. “Me di cuenta de que había muchos golpeados”, dice Larysa, “me senté no muy lejos del chaval al que se llevaban ante mí. Tenía una herida en el muslo. Pasé 4 horas en el Departamento del Interior y todo este tiempo su pierna estaba sangrando. Le acariciaba la cabeza y traté de animarle, como si fuera mi hijo o mi nieto”. 

El 8 de diciembre, en el Tribunal del distrito Savetsky de Minsk fue condenada Valiantsina Khilyutich, de 66 años. Antes de la sesión se quejaba de problemas cardíacos y de que a veces se desmayaba. "¿Entienden que no lo sobreviré?", le preguntó al juez. El juez sentenció a la mujer con problemas de salud a 10 días de arresto.  

El 14 de diciembre se produjeron detenciones masivas de jubilados en la plaza Niezalezhnasti de Minsk. Durante la "ronda alrededor del árbol de Navidad" metieron a más de 100 personas mayores en los autobuses y las llevaron al Departamento del Interior. La mayor de ellas, Valerya Spirydonava, tenía 89 años. "Suba al autobús, revisaremos sus datos y le dejaremos ir", nos prometieron unas personas vestidas de uniforme. Pero fuimos engañados. Muchos fueron condenados a días de arresto, muchos recibieron multas," comenta la anciana. 

Y ¿qué sucede en las prisiones durante la epidemia de coronavirus? “Los órganos estatales deliberadamente no están tomando ninguna medida para proteger a los detenidos del coronavirus. Los pacientes no reciben asistencia médica”, se comunica en el informe provisional del Comité Internacional para la Investigación de las Torturas en Belarús. 

No entiendo la razón de meter a los jubilados en las celdas. ¿Son realmente tan peligrosos para la sociedad? Encima, durante la epidemia. 

Al poder vinieron unos verdaderos tragasangres, prometiendo a los jóvenes un futuro y a los ancianos, estabilidad. ¡Nos mintieron! ¡No cumplieron sus promesas!

El tribunal de la ciudad de Zhodzina multó a Iraida Misko, de 75 años, con 1,5 pensiones por expresar su protesta con una pasta de fruta blanca-roji-blanca en las manos. Vinieron a su casa para registrarla y se llevaron su ordenador. ¡Y cuántos son detenidos por paraguas blanco-roji-blancas! 

Cerca de la ciudad de Vitsiebsk fueron detenidas seis jubiladas que practicaban caminatas escandinavas en el bosque. “Estábamos rodeados de gente de negro”, logró comunicar una de las mujeres a su esposo. Y se cortó la conversación. 

"Tres veces en la prisión pedí llamar a un médico, pero nadie respondió a mis quejas", dice Alena Litvinava, de 57 años, una maestra de la ciudad de Gomel. La mujer pasó 5 días en el Centro de Detención Preventiva a la espera de juicio. Aunque, la legislación de la República de Belarús permite detener a la persona en un caso administrativo por solo 72 horas! No le dieron medicamentos, no recibió asistencia médica. 

La campeona de la URSS en tiro al blanco, Yelizaveta Bursava, de 87 años, fue sancionada con una multa por la bandera blanca-roja-blanca en el balcón. "He vivido para ver otro fascismo en mi país".

 Halina Derbysh, de 59 años, "abuela terrorista" de las cercanías de Hrodna. Persona con un corazón de oro: ayudaba a las personas y a los animales sin hogar. ¡La KGB la agregó a la lista de personas involucradas en actividades terroristas! Halina fue detenida el 10 de diciembre, tiene problemas oncológicos y cardíacos. Su estado de salud se deterioró gravemente en la prisión. 

Los tribunales mediante Skype ya son una práctica común. ¡La vista puede durar sólo 5 minutos! Por ejemplo, en el cronograma del 11 de enero de 2021 hay 10 jueces en el Tribunal del distrito Partyzansky de Minsk. Cada uno tiene de 4 a 6 vistas. Se dan de 5 a 20 minutos para la consideración de cada caso. Algunos de los detenidos fueron condenados en rebeldía y ni siquiera fueron informados sobre el juicio, y así privados del derecho a la defensa. 

 “Después de que me liberaron, me enteré que me condenaron a 20 días”, dice una mujer siniestrada. 

Los pensionistas formularon muchas quejas sobre la calidad de la comunicación durante el juicio a través de Skype: no pueden escuchar lo que dice el juez, la gente no tiene tiempo para entenderlo. Los reclamos y denuncias de las víctimas no son atendidas, les apresuran y, como resultado, los juicios se celebran como en una cinta transportadora. Castigan a personas inocentes, de hecho, personas dignas que expresaron su opinión de manera PACÍFICA. “NO DEBE HABER OTRA OPINIÓN EN NUESTRO PAÍS”, dicen las autoridades.

 Los que habían pasado los días de arresto hablaron sobre las condiciones de detención. No se recibieron paquetes para ellos. Las celdas estaban superpobladas

 ¡Imagínese a un anciano en una celda fría sin colchones, obligado a dormir en un suelo de hormigón! “Éramos 12 en la celda para 4 personas”, recuerda una de los detenidos, “las cuatro mujeres se cepillaban los dientes con el mismo cepillo de dientes, ya que no había envíos desde fuera”. 

Condiciones insoportables de prisión, amenazas de represalias contra hijos y nietos, negación de asistencia médica, insultos, casos de uso de gas, multas enormes que exceden el volumen de la pensión en 2-4 veces. Algunos funcionarios del estado incluso llamaron a privarnos de las pensiones por ser ingratos al expresidente. Todo esto se usa contra ancianos indefensos que se atreven a expresar su opinión sobre el estado. El estado que construyeron con su trabajo, al que pagaron impuestos regularmente durante toda su vida. ¿Es realmente posible el genocidio de personas mayores en un país europeo en el siglo XXI? 

 ¡Queremos ser PERSONAS DIGNAS y tener nuestra propia opinión! Nosotros, que hemos trabajado toda nuestra vida por el país, debemos cerrar la boca y mirar humildemente cómo este país se desmorona, cómo se realiza el boolling de nuestra juventud, cómo la “flor de la nación”, científicos, periodistas, médicos, maestros, se convierten en prisioneros?

A los detenidos en una de las cárceles les hicieron ir por un pasillo largo a gatas. Una jubilada, ex médica, no podía gatear debido a las articulaciones lesionadas. Tuvo que moverse de rodillas. Esto es pura tortura. ¿No es así?  

No hay asociaciones públicas de personas mayores en Belarús. Hubo tres intentos de registrar la Asociación Pública de Jubilados Belarusos "Nuestra Generación". Y lo rechazaron. Aquí es imposible una iniciativa pública sin mostrar lealtad a las autoridades. Tatsiana Zelko, líder de "Nuestra Generación", participa en las marchas de jubilados. Por la marcha de diciembre pasó días de arresto en la cárcel y fue multada con una cantidad que excedía la pensión promedia (por cierto, esta no es la primera multa en su cuenta).

  LOS DERECHOS Y LIBERTADES GARANTIZADOS POR LA CONSTITUCIÓN de la República de Belarús son violados, no tienen peso legal y son pervertidos por representantes de las autoridades en sus intereses personales. 

Jan Gryb, de 84 años, vecino de Minsk, participó en muchas marchas. A principios de enero lo sacaron a la fuerza de su casa y lo llevaron a los juzgados. Pero se negó a participar en la sesión: “Estos no son vistas judiciales, esto es un circo. No se guían ni por la Constitución ni por las leyes... Les dijeron sacar el dinero a la gente, y por eso no se avergüence ni siquiera de quitar el último centavo ni a un discapacitado, ni a un anciano, de quitarle el último pedazo de pan". Jan Gryb recibió una multa de varias pensiones

 No hay justicia en el país. ¡No funciona! ¡Pero la persecución, las torturas y el acoso funcionan bien! Y desde el 1 de marzo, entraron en vigor las enmiendas al Código Administrativo para endurecer las penas. 

El país que A. Lukashenka no quiere perder se ha construido con nuestras manos. Durante 26 años dirigió el país de manera inepta, y la gente común llevó a este país sobre sus hombros. 

Nina Bahinskaya es una mujer de 74 años, detenida decenas de veces, nuestra heroína de fama mundial. ¡Parece que nadie podrá doblegar a esta pensionista! La frágil abuelita con la bandera en sus manos más de una vez inspiró a la gente en las marchas. Y aunque A. Lukashenka el 20 de octubre ordenó “no llevársela de las plazas”, ya el 5 de noviembre, las fuerzas de seguridad con la participación de la policía antidisturbios realizaron un registro en la casa de Nina Bahinskaya. “De hecho, soy un patrocinador de la policía, así que no les tengo miedo... Si me matan, ¿quién os pagará su salario? Se lleban, me roban, el 50% de mi pensión".

 Grygory Shadursky, de 83 años, un ex futbolista del equipo de Minsk "Tarpeda", jugador de hockey de la selección nacional de la Bielorrusia Soviética, junto con muchos participaba en las marchas de protesta. “¿Qué me movió? Soy belaruso. Siempre hubo algo así en mí. Quizás, un sentido de patriotismo por deporte. Siempre he pensaba que no puede haber mejor lugar de Belarús”. El 20 de diciembre fue detenido. Le llevaron al pasillo. Los pusieron contra la pared con las manos en alto. Permaneció así durante 1,5 horas. Más tarde, ya en casa, mostró dos fotografías. En una de ellas, los vecinos de Minsk están parados con las manos en alto junto a la pared del Departamento del Interior de la región de Minsk, en la otra, la misma imagen de los tiempos de la Segunda Guerra Mundial: “¡Miren, son unos salvajes! Simplemente se burlan de la gente. La violencia contra los ancianos es un horror”. 

Entre nosotros hay "luchadores" como Alena Gnauk de la ciudad de Brest. La pensionista ya fue detenida varias veces, cumplió 15 días de arresto, recibió una cantidad increíble de multas. Pero ella continúa haciendo lo que su conciencia le dice que haga. 

El primer día de primavera, juzgaron a las jubiladas detenidas en el tren de cercanías de Minsk por leer libros en belaruso. ¡La veterana laboral, pensionista oncológica, Halina Gulenkava, fue sentenciada a 20 días de arresto! Halina se declaró inocente. ¡El resto también recibió 15-20 días de arresto y multas que van de 2 a 4.5 pensiones!

¡Cuánto DINERO le ha robado el poder a los pensionistas! ¡Cuántas personas han cumplido y siguen cumpliendo días de arresto en condiciones inhumanas! ¡ESCRITORES BELARUSOS, EL ORGULLO DE LA NACIÓN, ESTÁN PROHIBIDOS! ¡El alma duele de este caos!

  Llamamos a la comunidad mundial para que preste MUCHA atención a la violación de los derechos de los ciudadanos de Belarús y plantee la cuestión del enjuiciamiento de los culpables en la Corte Internacional de Justicia. 

 Los dictadores siempre y en todas partes buscan esclavizar a la gente. ¡Pero seguimos luchando por nuestro futuro y para que nuestro país sea libre y próspero, finalmente apareciendo en la galaxia de la constelación democrática! ¡Seguimos luchando por un mundo RAZONABLE, en el que la ley, el respeto a la persona y el progreso serán la garantía de la felicidad y el bienestar universales!