•La Chupona Pecadora, Mi Favorita...
Contos
-Escritor: Marcus L. Galindo.
-Categoría: Infidelidad.
-Tiempo Estimado de Lectura: {9min.}
Ella ahora va a mamármela, se la mete en la boca, esta vez comienza a hacerlo muy despacito y con dulzura, no hay prisas hoy parece y ella quiere degustar mi salchicha, la saborea a ritmo lento, masajea mis testículos con sus yemas de los dedos de la forma más placentera, es delicioso como Erika me lo está haciendo hoy y se lo digo que me encanta esta mamada y que me las haga siempre así, ahora la disfruto de verdad, hay cariño y complicidad en este momento, ambos tranquilos sin mirar el reloj, ella se conforma con sexo oral de momento, yo le pregunto si a ella su marido le lame la vagina y me responde que no, yo le propongo de lamerse-la si ella quiere y dice que le parece bien la idea, pero más tarde, ya que tenemos casi toda la tarde por delante hoy.
Erika continua, con esa mamadita delicada y sensitiva, y le repito me encanta como hoy lo está haciendo, la veo dedicada con ganas de hacerme gozar a fuego lento (sin prisas) y así conseguirá que yo eyacule a presión un poco más de cantidad varios (chorritos cuajados) aunque no “cañezatos” como años atrás me salían, hoy por haber abusado del sexo y masturbación compulsiva (satiriasis) el cuerpo pasa factura, bien que me salgo del tema, Erika la mama de una forma espectacular me está matando de placer, noto un gustazo tremendo en mi próstata, pero no me vienen aún ganas de correrme, sino que ella me estimula mi pene y me bombean los órganos reproductivos interiores por ese placer que me está provocando, y esto me está haciendo sufrir un poquito, pero es agradable tampoco una tortura en plan “fendom” (mujer dominante) porque Erika lo que quiere es disfrutar chupándola y que disfrute yo.
Ahora llega el momento en que Erika me mira fijamente y me dice que acepta esa lamida de vagina (cunnilingus) a ver qué tal es, quiere probarlo.
Le digo que se baje el pantalón, mejor que se despelote y se acomode, a su gusto, con confianza, de buen rollo, y Erika comienza a desvestirse poco a poco, primero ese pantalón tipo chándal, luego esa camiseta de manga corta, su ropa interior hoy la lleva de color rosa (color vivo) raro en ella, pero es irrelevante, lo relevante es que voy por primera vez a ver “el mundo”
-¡Vamos Erikota!, quítate las bragas, ¡bragas fuera!, ¡quiero ver el mundo nena!, nunca te he visto el “pelusete”.
-Ja, ja, ja, tío, que cosas dices, colega, venga, mira.
Ella se quita sus braguitas y veo su coñito, natural, con poco pelo castaño claro como el de su cabeza, me gusta, me voy a comer todo ese pelito y todo.
Ella se incorpora en el sofá, le alzo sus piernas y comienzo a lamer, su mata de pelo vaginal cortito, joder, huele rico (un poco fuerte) y le digo que me gusta ese olor, ella me dice que se ha lavado dos veces por el día, pero que debe ser de estar mojada varias veces, eso debe ser a flujo reseco y me mola, es auténtico.
Ahora procedo a hacerle ese cunnilingus, le lamo la raja, le meto la punta de mi lengua en esa vagina ya dilatada de rato, ella respira hondo, dice que le mola la sensación y que siga, yo sigo le lamo y relamo ese “chichi” delicioso de sabor y olor, ¡joder, es exquisito!, y pasamos así cinco minutos más yo relamiendo y relamiendo, y….
-Ufffff, ufffff, tío, que gustazo, no pares, no pares. ¡waaaaaa, waaaaaaaaa!
(Erika se ha corrido, creo)
Si, así es, a ella le tiemblan las patas y el cuerpo, le miro la cara y sus ojos se le van hacia arriba como a su hermana la Jeide cuando se corre, pero Erika es más tranquila, no es tan escandalosa.
-Tío, que me hiciste correr.
-Ya ves, era lo que yo quería que tú también tengas tu momento de placer y disfrute, te lo mereces mujer, tienes que pedirlo, no esperes a que yo te lo ofrezca, tú pide Erika, no quiero ser egoísta, siempre dándote polla.
-Jejej, guay, bien. [Y ella añade] -Este finde estaré sola en casa, mi marido sale de viaje al templo, estará un par de días en la capital, si te vienes haremos de todo, si quieres sexo, o me lo chupas como hoy, lo que me proponías de la mamada larga, vamos de todo colega.
Erika me propone algo grande para dentro de cinco días, hoy es lunes, así que tengo que estudiar para este sábado lo siguiente, o voy normal para dar la talla si quiere que le eche un buen polvo, o en plan “tó cargao de lefa” con toda la fiebre de calentura para experimentar eso de la mamada larga y explotarle una buena fuente de semen a presión en su boca, un buen “freixenet” como yo digo como si una botella de cava o champagne agitada disparase su tapón de corcho y saliese toda la espuma, ya me lo pensaré y se lo iré comentando por el whats.
Y ahora le pregunto a ella:
-¿Qué hacemos guapetona?, te corriste y ahora falto yo, que te apetece, tú dirás.
-Té continuo mamándola hasta que eyacules, que tienes que tener ganas supongo.
-Ya te digo, muchísimas, me aprietan los huevos.
-Seeee, tiene que salir ¿eh?
Así que Erika me vuelve a hacer una mamada como la de antes, ya que hoy no hay prisas, tenemos tiempo para gozar, pero yo estoy a tope y he aguantado mucha excitación, le digo a Erika que aumente el ritmo y me haga la mamada como la vez anterior más acelerada y “slurp” con ese sonido bucal, una mamada tipo “sloppy” como suelen decir en inglés, pero rápida que me la chupe como una posesa o como si ella fuese una vampira del semen, y ella se ríe y me dice que de acuerdo.
Y Erika comienza a pegarme un mamadón succionando con su boca a ritmo más rápido, esta chica está hecha un buen “súcubo” (un demonio) para ser una mujer religiosa que, por un lado, lleva una vida de moral y principios y en la intimidad mantiene relaciones sexuales fuera de su matrimonio conmigo.
-¡Uyyyy! Erika, que me vienen ganitas ya.
-mmmmmmmmm (murmura ella con mi polla en su boca)
-¡waaaaaaaaaaaaaaa! ¡aaaaaaaaaaaaaaahhhhh! ¡aaaaaahhhh! (Me corrí)
A Erika casi se le va la corrida por la tráquea y tose.
-Joder, que se me fue por el otro lado.
-Tranquila cielo, tose o ves al baño.
-Naaa, tranquilo, solo fue un poco, todo bien, me lo tragué, te sale cada vez más tío, eh.
-Sí, me estás haciendo recuperar cantidad en las eyaculaciones.
Después de quedarnos bien a gusto los dos, nos damos un baño juntos y luego ella se marcha, nos damos dos besos en las mejillas, ella me sonríe y me dice que se marcha satisfecha para su casa, estamos en contacto para este finde.
Continuará…