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V. LAS PIRÁMIDES DEL IMPERIO MEDIO » La pirámide de Senwosret II
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LA PIRÁMIDE DE SENWOSRET II
En la región de El-Lahun, el nuevo faraón ordenó erigir su morada para la eternidad y le puso como nombre ‘Senwosret está satisfecho’. La pirámide alcanzó en la antigüedad una altura total de cuarenta y ocho metros, con unos lados de ciento siete metros y un ángulo de 42º E 35 ‘. Los obreros del rey edificaron este monumento sobre un montículo rocoso, lo que les proporcionaba una sólida base, y se dispusieron a revolucionar el complejo constructor, que había seguido más o menos unos patrones del Imperio Antiguo. En un primer término, macizaron la construcción con ladrillos de adobe y, a continuación la revistieron con bloques de caliza de las canteras de Tura. También hay que constatar el curioso sistema de drenaje que existe alrededor de la pirámide, lo cual indica que Senwosret II fue testigo de las desgracias que afectaron a las pirámides de sus antecesores. Pensando en los moradores nocturnos, el soberano ordenó construir la entrada a su morada para la eternidad en la cara sur en lugar de en la cara norte. El resultado fue obvio, y a pesar de que William Flinders Petrie tardó varios meses en hallar la entrada e internarse en el monumento, dos mil años más tarde, no encontró más que desolación.
Otro elemento extraño es la capilla norte. Como su propio nombre indica, esta estancia destinada a ofrendar al rey difunto se situaba en la cara norte de la pirámide, pero Senwosret II la manda construir en el lado este de la pirámide, abrazando al astro que se levanta. Si antaño estas estancias eran amplias, esta es más bien de ridículas dimensiones. Traspasada esta capilla, se abre un pasillo estrecho, demasiado estrecho como para que un sarcófago se pudiera deslizar al interior. Esto ha hecho pensar a los egiptólogos, lógicamente por otro lado, que el sarcófago fue colocado antes de levantar los muros del corredor. Otra sorpresa nos aguarda en este punto, pues bajo un paso descendente se halla la cámara funeraria de una princesa cuyo nombre se desconoce, forrada con roca de granito. Petrie halló un precioso sarcófago de granito rojo. Al lado de este encontramos una mesa de ofrendas tallada en alabastro, con un cartucho del rey grabado. En la esquina sur-oeste, Petrie halló un compartimiento lateral donde reposaban los restos de una pierna momificada, posiblemente de Senwosret II. La maldición de los saqueadores de pirámides había visitado al rey difunto.
Sin embargo, la enigmática figura de Senwosret todavía escondía una sorpresa más. En el año 1913, Flinders Petrie y Guy Brunton hallaron, en un barranco al sur de la pirámide, ocho mastabas de la familia real. En realidad, nos encontramos ante un conjunto de galerías, que a simple vista parece una simple construcción. Se sospecha que al menos, en un principio, cuatro de estas galerías estaban cubiertas por una pirámide. En cada galería hay un corredor que desemboca en cuatro compartimientos, todos concebidos para albergar un sarcófago en su interior. Un segundo nivel conduce hacia ocho habitáculos que también contenían sarcófagos. Dos de ellos tenían el nombre de la propietaria: la princesa Ment y la princesa Senet-Senebti. En otro segundo grupo de galerías se halló el ajuar funerario de la princesa Sit-Hathor. Este ajuar es hoy conocido como «el tesoro de El-Lahun», y no sería aventurado asegurar que es todo lo que se ha podido rescatar de la XII Dinastía, ya que la morada para la eternidad de Sit-Hathor fue la única que se salvó de los saqueadores, como veremos más adelante.
El recinto del complejo funerario de Senwosret II se hallaba flanqueado por un enorme jardín en el que había varias clases de árboles. Con toda seguridad, serían árboles de donde se extraerían los productos para los ritos, tales como el incienso. Al este de la pirámide, Petrie halló los cimientos de un santuario que constaba de un amplio patio y una columnata. Aquí, en un pozo poco profundo, se encontraron los depósitos de fundación, que consistían en cerámicas y placas de ladrillo con los cartuchos reales de Senwosret.