Viviendas: "en Jujuy deberían haber rescatado lo virtuoso de la Tupac"
PUNTO.ARUn funcionario nacional habló del relanzamiento del plan PROCREAR con duras críticas al macrismo y defendió el modelo de Milagro Sala. "Traía soluciones".
El gobierno nacional busca que la industria de la construcción marque el camino de salida en la post pandemia, aún sin fecha cierta pero cada vez más esperada por las urgencias económicas.
El plan Argentina Construye, con casi 29 mil millones de pesos y la expectativa de 750 mil puestos de trabajo proyectados, entre directos e indirectos, es el emblema.
En su interior el añorado programa PROCREAR, solución para cientos de miles de familias que lograron hace casi dos lustros acceder a su primer vivienda por esa vía, le da contenido a Argentina Construye.
Luciano Scatolini fue hacedor de PROCREAR en su primera etapa y reaparece ahora en la refundación, tras el giro que tuvo en la gestión de Cambiemos.
“Les dejamos un auto de carreras y nos devolvieron un carro embarrado”, resume el funcionario, miembro actual del Comité Ejecutivo de aquel programa.
Aunque Scatolini toma elementos técnicos como disparadores, los posicionamientos ideológicos aparecen constantemente en sus declaraciones.
Su reivindicación del modelo que supo forjar Milagro Sala “como proveedor de viviendas”, lo demuestra, al punto de desconfiar de las investigaciones documentadas que justificaron la condena y privación de la libertad actual de la Presa Política.
“Creo en eso, siempre y cuando hablemos de una justicia independiente, y Jujuy también es muy emblemático en ciertas cuestiones relacionados con la manipulación del Poder Judicial por el poder político”, afirma.
Entrevista al subsecretario de políticas de suelo y urbanismo, Luciano Scatolini
- ¿Cuándo van a empezar a otorgar créditos?
LS - Es inminente. PROCREAR ya fue relanzado por el ministro de economía Martín Guzmán que hizo el anuncio al inicio de la pandemia. Ya están volcados los fondos presupuestarios.
Es fácil destruir. Yo fui director de PROCREAR de 2012 a 2015 y puedo decir que había quedado un auto de carrera funcionando. Me reuní con autoridades del gobierno de Cambiemos cuando asumieron, me pidieron que les cuente, me manifestaban lo virtuoso que veían ellos este programa, que era de las políticas públicas que había que mantener, de hecho me quedé unos meses colaborando con esa transición.
Lamentablemente lo que sucedió es lo que pasa muchas veces en la Argentina, que por el hecho de que sea un gobierno de un determinado partido se abandonan esas políticas públicas y se va hacia otras porque hay un sesgo más ideológico que de práctica y de sentido común.
Entonces nosotros dejamos andando un auto de carrera y nos encontramos con un carro embarrado y atascado que hay que empujar.
Nos costó unos meses volver a ponerlo arriba de las pistas, pero estamos seguros de que cuando pueda empezar a andar de nuevo PROCREAR va a volver a ser ese programa virtuoso que quedó instalado en el corazón de los argentinos y las argentinas como un programa que le resolvió a muchísimos sectores sociales las necesidades de vivienda.
- Cuando llega la gestión actual a Jujuy se pone una meta muy ambiciosa y se propone 4 mil viviendas por año. Eso quedó muy lejos. ¿Por qué crees que esto ocurrió?
LS - En general las políticas de viviendas en Argentina y en el mundo han sido erráticas. Ha habido viandazos, estas ideas de ir a programas keynesianos donde salimos a la construcción de viviendas sin importarnos demasiado donde las localizamos, qué calidad de viviendas hacemos, cómo controlamos el gasto de lo que efectivamente se invierte para construir. Esa lógica ha tenido algunas etapas.
Sacando los planes quinquenales del gobierno de Perón, donde sí hubo programas de viviendas muy claramente estructurados, pensados y diagramados que contemplaron todas las distintas instancias que necesita una política de viviendas, recién podría decirte que eso se recuperó a partir del PROCREAR a mediados de 2012, que no resolvió integralmente porque había un sector de la sociedad que no accedía al PROCREAR.
Lo que necesitamos son políticas de mediano y largo plazo, rompiendo la idea de fragmentación, no sólo en términos programáticos, también de ejes conceptuales, ideológicos y políticos, y el prejuicio también que nos genera que haya habido, como en el caso de Jujuy, una fuerte participación de la organización Tupac para ser proveedora de vivienda.
Lo que debió haber hecho el gobierno de Jujuy es tomar todo lo virtuoso que había hecho la Tupac, y seguramente lo que había que corregir, mejorar, haberlo mejorado.
Gran parte de la respuesta está en esto. En decir “todo lo que estuvo ligado a Milagro Sala fue algo que estuvo mal hecho, vamos a hacer algo totalmente distinto”. Y ahí pasa algo parecido a lo que pasó con PROCREAR. Algo que estaba muy bien, que generaba soluciones, que podía generar condiciones de vida de trabajo y de producción, fue reemplazado por un modelo pensado hacia el sistema financiero, de intervención de los bancos privados, del subsidio.
- Si en Jujuy alguien te escucha te van a decir que Milagro Sala se robó 1300 millones de pesos, que alcanzaban para construir 2200 casas
LS - Bueno, esto sucede en general cuando también hablaban de la ex presidenta o del gobierno que se fue en 2015 y decían se robaron dos PBI. Realmente, esos clichés, que tienen que ver con instalar en el sentido común de la sociedad a través de la hegemonía de algunos sectores de poder y mediáticos, no creo en eso.
Y la respuesta la da la ciudadanía también a esas lógicas hegemónicas que quieren hacer creer determinadas verdades, que además son disparatadas. Tanto en relación a lo que puedan decir de Milagro Sala como cuando decían se robaron dos PBI.
Es muy fácil destruir, armar clichés, generar propaganda de la destrucción, y es tan difícil construir.
Vos decías recién. En Jujuy, prometieron que iban a hacer tantas viviendas y terminaron haciendo una décima parte.
- Hay investigaciones documentadas por una fiscalía y por una oficina anticorrupción ¿vos considerás que son clichés?
LS - No. Lo planteo en términos macro. No creo que haya sucedido que se robaron todas las viviendas, toda la plata o todos los PBI. Pienso que como cualquier sistema de poder público privado, hay personas honestas, deshonestas, cosas que se hacen de manera transparente y cosas que tienen más oscurantismo y opacidad.
Sí creo lo que vos señalás, que hay una investigación de la justicia, siempre y cuando hablemos de justicia independiente porque creo que Jujuy también es muy emblemático en términos de ciertas cuestiones relacionadas a la manipulación del poder judicial por el poder político.
También creo en el principio de inocencia.
Me parece que lo hay que hacer en este caso y en cualquier otro en el que pueda haber habido desvío de dinero es sancionar con todo el peso de la ley a quien haya cometido ese desvío, siempre que se haya probado que efectivamente sea así y a partir de una investigación donde se haya dado derecho a defensa y todas las instancias que ese derecho tiene.
Lo que te decía es más en términos conceptuales. Cómo un determinado esquema de poder, político, empresarial, de privilegios históricos de la Argentina, a todo lo que tuvo que ver con modelos más redistributivos, de ampliación de derechos, más de lógicas a partir de las cuáles los sectores populares tuvieron un mayor nivel de intervención en las cuestiones públicas, enseguida se les generó una carga subjetiva muy fuerte.
No estoy defendiendo cuestiones que puedan tener que ver con desmanejos ni mucho menos con corrupción. Nosotros condenamos los actos de corrupción de cualquier sector, de cualquier partido político, de cualquier dirigente.
Mis consideraciones son en términos más genéricos. Lo que puedan instalar los medios en Jujuy o en Buenos Aires, hubo claramente una política mediática de enorme denostación de todo lo que tuvo que ver con modelos más redistributivos, modelos que tuvieron que ver con la participación de los sectores populares, y los resultados son los que tenemos hoy, terminó siendo el salario una variable de ajuste, trabajadores encarcelados, referentes sociales perseguidos, y la verdad que no hemos visto esa situación en los grandes empresarios que fugaron miles y miles de millones de dólares de la mano de un gobierno que le abrió esas puertas para que la riqueza argentina se vaya del país.
- ¿Qué requisitos se deben cumplir para acceder a líneas de PROCREAR?
LS - Tener entre uno y medio y ocho salarios mínimos. Después, tiene que ser vivienda única, familiar y de ocupación permanente, o un lote o terreno para ese destino.
En el caso del programa Argentina Construye Solidaria, que es otro de los programas que lanzó el ministerio para atender esta emergencia, es un programa de subsidios que está destinado a organizaciones comunitarias no gubernamentales que hacen un trabajo solidario para atender a sus vecinos y vecinas en distintos lugares del territorio.
Ahí como se trata de subsidios, los requisitos tienen que ver con que la organización preste efectivamente esos servicios y tenga una personería.
- Cuando se lanzó Argentina Construye, gente de la Cámara de Construcción se mostró preocupada porque interpretan que el plan está orientado al cooperativismo más que a las empresas ¿esto es así?
LS - No. El programa Argentina Construye está pensado para la emergencia, necesitamos acciones de rápida implementación y de fuerte impacto territorial. Pero nosotros en el relanzamiento de PROCREAR estamos retomando lo que se había abandonado.
Vos pensá que en los cuatro años de Cambiemos no se construyó una sola vivienda de desarrollos urbanísticos. Ni una sola eh. Las viviendas con las que nos encontramos nosotros sin entregar se habían empezado a construir entre el 2013 y fines de 2015. Ni una sola vivienda construida. Y tampoco yo escuchaba muchas quejas de los sectores ligados a las Cámaras contra el gobierno anterior que habían desfinanciados absolutamente estos programas. Nosotros le dimos espacio.
- ¿A cuántas personas aspiran a alcanzar en Jujuy?
LS - El crecimiento de las ciudades de manera informal está creciendo de dos a tres veces en el mundo por encima de lo que crecen las ciudades de manera formal.
Hay un fuerte crecimiento de la autogestión para resolver las necesidades habitacionales por sobre la planificación, la prevención y la intervención del estado en cómo se construye ciudad, cómo se planifica.
Argentina tiene tasas de urbanización altísimas, es uno de los 10 países más urbanizados del planeta con tasas por encima del 90%.
Lo que estamos pensando en Jujuy no sólo tiene que ver con resolver la situación de vivienda si no en pensar algo virtuoso que pueda unir áreas de mucho desarrollo como el valle de Tilcara que está generando a través del turismo una gran participación de distintos actores públicos y privados, a las ideas de la planificación del uso del suelo.
Por eso estamos trabajando con la provincia en un programa de desarrollo de áreas metropolitanas del interior, pensando en financiar a la provincia para trabajar en conjunto una dinámica que pueda unir el crecimiento de ciertas áreas como la que te mencionaba recién pero con criterios de uso de suelo y de planificación para que quien trabaje en el lugar pueda a su vez acceder a una vivienda digna.
Lo que estamos viviendo hoy en el conurbano, en el área metropolitana de Buenos Aires donde está tan fuerte la situación de la pandemia, nos está marcando que la lógica de ocupar territorio y concentrar a la población en un porcentaje tan bajo de nuestro suelo es un grave error.
No sólo queda desnudo en situaciones como estas de pandemia sino también en la cotidianeidad donde encontramos familias viviendo hacinadas, sin acceso a espacios públicos ni buenos equipamientos urbanos.
Necesitamos que el interior se potencie, que crezca en base al turismo, al empleo y la producción y que eso vaya unido a políticas de hábitat que tiene a la vivienda en el centro de esa agenda.
Fuente: Jujuy al momento