¿Viaje a Machu Picchu como aclimatación?

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Machu Picchu es un monumento misterioso de fama mundial de la era Inca, ubicado en las montañas de Perú, a 80 km de la capital de la región del Cusco y a 520 km de Lima. Por supuesto, visitar este maravilloso objeto es de gran interés; sin ninguna duda puede llamar a Machu Picchu una de las principales atracciones de Perú y una de las 7 maravillas del mundo. Sin embargo, en el contexto del turismo activo y el montañismo, a menudo surge la pregunta: ¿cómo combinar la excursión turística a Machu Picchu con las otras partes más activas del programa turístico?

La opción estándar, un viaje a Cusco y una excursión a Machu Picchu, se posponen para el segmento final del programa general, en un momento en que ya se han completado todas las actividades de escalada, trekking y otras actividades de montaña. Hay una cierta razón para esto: después de todo, para la mayoría de los participantes de mis programas de montaña en Perú, el interés principal está en los bloques activos del programa: escalada y trekking. La mayor parte del tiempo se reserva para las ascensiones a las cumbres y en general estar en las montañas. La excursión de la parte turística, especialmente la que "consume recursos" como Cusco y Machu Picchu, se queda para el "postre", o se excluye inmerecidamente de los planes generales.

Sin embargo, visitar Perú sin la oportunidad de visitar Machu Picchu, tal autocontrol puede hacer que su viaje sea desequilibrado. Aún así, a pesar de su brillante naturaleza pop-turística, una excursión a Machu Picchu amplía significativamente los horizontes y permite experimentar emociones vívidas incluso para los viajeros más experimentados. Negarse esta experiencia no siempre está justificado, incluso si no es fanático de los destinos turísticos más populares.

Basándome en mi experiencia personal, quiero ofrecer otro formato más racional (en mi opinión) para integrar una interesante excursión a Machu Picchu en los programas de escalada o montaña activa. El hecho es que el monumento de Machu Picchu (y toda la región de Cusco) se encuentran significativamente más altos que la zona costera de Perú, en la zona climática llamada Sierra, un desierto de gran altitud.

Las altitudes absolutas a este nivel oscilan entre los 2800 m y los 3800 m. En otras palabras, permanecer en esta región está asociado con una cierta carga de gran altitud en el cuerpo. Desde este punto de vista, un viaje a Machu Picchu y un programa de excursiones en la región del Cusco pueden considerarse como un programa de preaclimatación antes de los ascensos a las montañas a altitudes de 4 a 6000 m.

Tal enfoque permite distribuir el tiempo de manera más compacta y racional y ahorrar espacio del programa turístico. Permite integrar cualitativamente el bloque de excursiones más interesante en el programa de escalada activa, para que sea posible realizar el proceso de aclimatación de forma más fluida y segura.

¿Qué necesitamos para esto? Primero, prestar atención al programa de aclimatación y seguir las principales recomendaciones generales para prepararse para los programas de alta montaña:

• No sobrecargar y no forzar el horario del programa, dejando siempre tiempo para un buen descanso
• Recupérate bien después de cualquier carga estresante
• Evitar cualquier sobrecarga del cuerpo durante el período de adaptación.
• Evite la comida chatarra, el alcohol
• Agregue entrenamientos ligeros a la lista de actividades diarias (caminar intensamente, carreras cortas, ejercicios generales en el gimnasio)

No debe olvidarse que, además de las cargas de estrés climático y de gran altitud en el cuerpo, muchos viajeros a Perú enfrentan dificultades adicionales debido a la transición a otra zona horaria (UTC -4, la diferencia con Europa es de 5 horas). Como regla general, los viajeros necesitan de 3 a 5 días para que los procesos fisiológicos del cuerpo se ajusten a un horario diferente.

Esa es también una buena razón para elegir el viaje a Machu Picchu antes del inicio de la parte activa del programa de montaña. En este caso, es posible recuperarse, pasar el período de jet lag y adaptarse sin problemas a las nuevas condiciones en un ambiente confortable y fascinante atmósfera de las excursiones más interesantes.

En resumen, si decide incluir una excursión a Cusco y Machu Picchu en su programa activo en Perú (especialmente montañismo), debe considerar un programa que comience, en lugar de terminar con una excursión a Machu Picchu.

Autor de texto y fotos Alex Trubachev
Guía de Montaña de Perú, Bolivia, Argentina y Chile

EDICIÓN MCS 2023