Señor destino: un final distinto para su vida
Fernando Alexis Jiménez - www.Conexion365.Org
“Sabemos que Dios va preparando todo para el bien de los que lo aman, es decir, de los que él ha llamado de acuerdo con su plan.” (Romanos 8:28 | TLA)
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¿Alguna vez pensó que su vida hubiese sido distinta de haber tomado otras decisiones?
Por ejemplo, escoger una persona distinta para que fuera su compañero o compañera de viaje en el matrimonio.
¿O quizá, tener hijos distintos?
¿Y si hubiese estudiado otra carrera? Y gracias a los estudios tuviera otro trabajo.
El listado puede ser infinitivo al revisar qué hubiésemos querido y logrado con decisiones diferentes en su vida.
Permítame ilustrarlo a partir de la película “Señor Destino” que se estrenó en 1990 y que protagonizaron Linda Hamilton, Rene Russo, Jim Belushi y Michael Caine.
UN FINAL DIFERENTE PARA SU VIDA
En la película Mr. Destiny, Larry Burrows se lamenta de una decisión que tomó hace veinte años, creyendo que, si hubiera bateado el jonrón en el partido de campeonato, su vida sería perfecta.
Lo que Larry descubre es que, aunque su nueva realidad lo convirtiera en un hombre de negocios exitoso y adinerado, su felicidad se habría desvanecido.
No tendría su esposa, a sus hijos ni a los amigos que lo aprecian.
El dinero y el estatus no llenan el vacío que siente en su alma.

Esta experiencia nos invita a reflexionar sobre el error de creer que, si tan solo hubiéramos tomado un camino diferente, nuestra vida sería mejor.
Nos enseña que el destino que imaginamos, basado en logros mundanos, puede ser una ilusión vacía.
SU VIDA ES UN REGALO DE LA GRACIA DE DIOS
La historia de Larry Burrows resalta una profunda verdad espiritual: la vida que tenemos, con sus altibajos, es un regalo de la gracia de Dios.
A menudo, como Larry, nos enfocamos en el "y si..." en lugar de reconocer las bendiciones que ya poseemos.
Lo que parece ser un fracaso, como el jonrón que Larry no bateó, puede ser en realidad el desvío que nos lleva a las personas y experiencias que más nos moldearán y bendecirán.
La gracia de Dios no es un plan perfecto que nos libra de todo dolor, sino una guía que nos conduce a la vida que más nos conviene, incluso cuando no se parece a la que nosotros mismos habríamos diseñado.

Al final de la película, Larry se da cuenta de que la vida que tenía, con su esposa, sus hijos y sus amigos, es mucho más valiosa que cualquier éxito material.
El gran jonrón de su vida no fue el que podría haber bateado en el campo de béisbol, sino la familia y el amor que construyó.
La fe nos invita a soltar el control y a confiar en que la mano de Dios está obrando en cada detalle de nuestras vidas, incluso en las decisiones que lamentamos.

DECÍDASE POR UNA VIDA DIFERENTE
Pero hay algo en que sí puede cambiar el curso de nuestra historia. Me refiero a la relación con Dios.
Cuando nos acogemos a Su Gracia, el Señor perdona todos nuestros pecados. Sí, leyó bien. Los pecados del ayer y del presente.
Jesús murió en la cruz para traernos perdón y vida eterna.
Esa gracia está disponible para todos.
Ábrale hoy las puertas de su corazón a Jesucristo.
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Fernando Alexis Jiménez sirve a Dios en la Misión Edificando Familias Sólidas. Transmite el Programa Vida Familiar y, desde el 2016, dirige el Instituto Bíblico Ministerial.
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