SAMGAR. USA LO QUE TENGAS A MANO
Mefistoles Zamora
Hola hermanos, seguimos aquí estudiando y aprendiendo de la Palabra de Dios. Mencionar a los filisteos nos hace recordar al enemigo del pueblo de Dios, Israel. Los filisteos fueron un pueblo no semítico, de origen indoeuropeo, que ocupó la parte sur de la costa de Palestina. Junto con los egeos, los micenios y otros, formaban parte de los llamados "pueblos del Mar".
Por estos días “quedaron abandonados los caminos, Y los que andaban por las sendas se apartaban por senderos torcidos. 7 Las aldeas quedaron abandonadas en Israel, habían decaído,” Jueces 5:6,7 aterraban a la nación de Israel y nuevamente aparece un libertador de parte de Dios
¿Quién es este libertador? Samgar, poco o nada se nos dice sobre él. Era hijo de Anat que puede ser su padre o un lugar. Su nombre quiere decir “el que huye” o “él es extranjero”, lo cierto es que él no huyó, no fue un cobarde, más que juez fue un guerrero valiente. El ultimo verso del capítulo 3 nos dice: “Después de él fue Samgar hijo de Anat, el cual mató a seiscientos hombres de los filisteos con una aguijada de bueyes; y él también salvó a Israel.”
El solo mató a un número nada despreciable de filisteos, seiscientos, y lo hizo utilizando lo que tenía a mano “una aguijada de bueyes”. Esto es un instrumento de trabajo y no es un arma. De hecho, los israelitas tenían que ir a la tierra de los filisteos ha amolar sus instrumentos de trabajo, pues no tenían herreros.
¿Qué es una aguijada de bueyes? Es una vara de madera cuyo largo puede variar que en un extremo era puntiaguda, para aguijonear al buey, y en la otra era más como un cincel para raspar el arado y limpiarlo de la tierra.
Y esto es lo significativo de esta historia, usa lo que tenía a mano, no era un arma, pero bien empleada causo la muerte de seiscientos filisteos. Si Samgar se pone a esperar por conseguir un arma, seguro que no tendríamos el relato de su hazaña.
Cuantas veces nos ponemos a esperar o nos lamentamos si tuviera tal o más cual cosa seguro que podía hacer grandes cosas para el Señor. Hermanos cuando nos daremos cuenta que el Señor nos ha dado lo que necesitamos para realizar su obra. El objeto no es importante, Dios es el que hace la obra.
Dios le dijo a Moisés ¿Qué tienes en tu mano? Su respuesta: “Una vara”, cuantas cosas hizo Moisés con esa vara, David tomo una piedra la colocó en su honda avanzo en el nombre de Jehová de los ejércitos y el gigante filisteo cayó al piso. Señor solo tenemos cinco panes y dos peces, Jesús los bendijo comieron cinco mil personas y sobró. Samgar utilizo lo que tenía a mano y seiscientos filisteos murieron.
Hermanos tenemos dones y talentos maravillosos que podemos usar en función del evangelio y de nuestros hermanos. No sigamos esperando, usemos los que tenemos a mano y póngamelos en las manos de Dios y él se ocupará del resto. Hoy es el día de actuar, prediquemos, oremos, ayudemos, ofrendemos, trabajemos y de nosotros también se dirá “y él también salvó a Israel”