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MOSCÚ, 21 de mayo. /TASS/. Algunos analistas creen que las nuevas sanciones europeas contra Rusia son de carácter declarativo y no afectarán gravemente a la economía del país euroasiático. Al mismo tiempo, Europa no logra que Washington endurezca las restricciones contra Moscú. Además, expertos opinan que la probabilidad de que EE.UU. imponga aranceles del 500% a los importadores de petróleo ruso es muy baja. La revista de prensa de TASS le ofrece estos y otros temas que son noticia en los medios rusos.

Izvestia: Nuevas sanciones de la UE contra Rusia no encuentran el apoyo de Estados Unidos

Los países europeos no encuentran fuerzas para admitir que su política de sanciones ha fracasado y que la Unión Europea ha perjudicado en gran medida a su propia economía, afirmó a Izvestia Vladislav Máslennikov, director del departamento de asuntos europeos de la Cancillería rusa. El 20 de mayo, la UE aprobó el 17.º paquete de restricciones contra Rusia, que contiene, entre otras cosas, sanciones contra 75 personas físicas y jurídicas, así como contra 189 buques de la "flota en la sombra". Algunos analistas subrayan que las nuevas sanciones son de carácter declarativo y no afectarán gravemente a la economía rusa. Además, a pesar de los llamamientos de los políticos de la UE, Estados Unidos se abstuvo de endurecer las restricciones contra Rusia. Washington está dialogando con Rusia para resolver la crisis ucraniana, mientras que Europa de hecho está obstaculizando el proceso de paz.

"La UE no encuentra fuerzas para admitir que su política de sanciones ha fracasado, que ha perjudicado en gran medida a su propia economía. Y no quiere rendir cuentas de ello ante su propia población", declaró Máslennikov a Izvestia.

Es poco probable que las sanciones de la UE se levanten automáticamente tras el fin del conflicto ucraniano, subrayó el diplomático. En la actualidad, Hungría y Eslovaquia son los opositores más constantes al endurecimiento de las sanciones contra Rusia, pero su influencia no basta para frenar por completo la política de sanciones de Bruselas.

Si llegan al poder en la UE líderes con mentalidad pragmática, el paradigma de la política de sanciones puede cambiar, opina el enviado especial del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia para los Crímenes de Ucrania, Rodión Miróshnik.

"Pero, teniendo en cuenta los actuales sentimientos belicistas, no se trata de un futuro inmediato", añadió.

Las nuevas sanciones de la UE no causarán daños significativos a Rusia, dijo a Izvestia el director de programas del Club Internacional de Debate Valdái, Iván Timoféyev.

"La UE necesitaba demostrar que seguía una política independiente, pero se lo demostraron a sí mismos. El efecto económico del 17.º paquete será débil, y el efecto político será nulo e incluso inversamente proporcional", señaló el experto. "Si Estados Unidos la hubiera respaldado, habría sido más fuerte. Las sanciones estadounidenses son globalmente más significativas debido al papel del dólar", explicó.

Sin embargo, el presidente estadounidense Donald Trump no tiene prisa por imponer nuevas sanciones. En la noche del 19 de mayo, mantuvo una conversación telefónica con Vladímir Putin. No obstante, Estados Unidos podría cambiar su postura sobre las sanciones en el futuro en determinadas circunstancias, estiman expertos.

"Es necesario prepararse para el hecho de que las sanciones son para siempre. Hemos entrado en un periodo de confrontación con EE.UU. y la UE", comentó Alekséi Fenenko, profesor de la Facultad de Política Mundial de la Universidad Estatal de Moscú.

Nezavisimaya Gazeta: Zelenski ofreció tres plataformas para las negociaciones

Como observó el asesor del jefe de la oficina del presidente ucraniano, Mijaíl Podoliak, la última conversación telefónica entre los presidentes ruso y estadounidense no cambió nada, y Washington cree en vano en la capacidad de Moscú para llegar a un acuerdo cuando Kiev aboga por la única opción posible: un alto el fuego inmediato y total. Europa también apoya a Ucrania en esto. Y solo Estados Unidos sigue actuando como mediador global.

Por su parte, Vladímir Zelenski, al comentar sus propias conversaciones con el presidente estadounidense, Donald Trump, en una sesión informativa que ofreció el lunes, subrayó que, para confirmar su disposición al compromiso, Rusia podría aceptar, como primer paso, un alto el fuego incondicional. Al mismo tiempo, declaró inaceptables tanto la cesión de territorios (que pasaron a formar parte de Rusia como resultado de referendos) como el reconocimiento del estatus neutral de Ucrania. Al mismo tiempo, Zelenski de hecho cuestionó el llamamiento de Donald Trump en favor de conversaciones directas inmediatas entre las partes en conflicto en una posible plataforma de Vaticano. Según Zelenski, Kiev estudia ahora la posibilidad de una nueva reunión de equipos de Ucrania, Rusia, Estados Unidos, varios países de la UE y Reino Unido, que podría celebrarse en Turquía, Suiza o el Vaticano.

Kiev emite numerosas declaraciones contradictorias con astucia, afirmó a Nezavisimaya Gazeta un destacado experto del Instituto Ruso de Estudios Estratégicos Oleg Némenski. En realidad, señaló el especialista, el equipo de Zelenski está interesado en perturbar el proceso de negociación de todas las formas posibles. "Al mismo tiempo, para Kiev es importante culpar a Rusia de lo ocurrido. Espera enfrentar a Washington con Moscú para atraer a Donald Trump al bando de las élites globalistas europeas que se oponen radicalmente a Rusia. Y esto no quiere decir que no haya ninguna posibilidad. Aprovechando la conocida impulsividad y motivación personal del presidente estadounidense, los dirigentes de Kiev están llevando a cabo un juego activo, con la esperanza de ganarse al final su apoyo", indicó el analista.

Lo más probable, cree Némenski, es que Trump esté interesado en detener por un tiempo prolongado el actual conflicto militar, ya que Estados Unidos ya ha recibido todos los beneficios posibles de él. Y ahora Washington tiene otros planes por delante y le gustaría cambiar de región. "Hay que decir que para Trump la cuestión del arreglo ucraniano no es una cuestión de principios. Y si no logra avances a corto plazo, trasladará la responsabilidad de la crisis regional a los socios europeos", explicó.

Vedomosti: ¿Impulsará el levantamiento de las sanciones de Estados Unidos y la UE el resurgimiento de Siria?

Los países de la Unión Europea tienen la intención de levantar sus sanciones contra Siria, afirmó la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Kaja Kallas, antes de una reunión que ministros de Asuntos Exteriores y Defensa de la comunidad celebraron el 20 de mayo. Al mismo tiempo, los miembros de la UE mantendrán algunas restricciones sobre los familiares del depuesto presidente Bashar al Asad y sus aliados, así como sobre las personas implicadas en violaciones de los derechos humanos en la república árabe, informa la agencia Reuters.

El mismo día, un alto funcionario de la UE anónimo afirmó al medio The National que el levantamiento de las sanciones a Siria por parte de los europeos sería un "pago inicial" a cambio de la promesa de Damasco de continuar con el proceso de democratización en el país. Otro interlocutor del periódico afirmó que Bruselas planea mantener las sanciones contra los implicados en las matanzas de civiles perpetradas en marzo en la provincia de Latakia, en la costa mediterránea, donde, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, murieron más de 1.000 personas.

Con el levantamiento de las sanciones, la UE intenta demostrar su subjetividad en la política global y en Oriente Medio, considera Vladislav Belov, director adjunto del Instituto de Europa de la Academia de Ciencias de Rusia. Sin embargo, en su opinión, estas medidas demuestran la falta de comprensión por parte de Bruselas de la situación en la región y de una estrategia clara en Oriente Medio. "El nuevo régimen sirio es tan ambiguo según los criterios europeos como el anterior. Es decir, de acuerdo con su lógica, la presión de las sanciones sobre Damasco no debería reducirse, sino al menos mantenerse. Quizá sea su forma de intentar enviar una señal a Moscú de que están dispuestos a levantar las restricciones solo si se produce un cambio de poder", indicó el politólogo.

Además, continuó Belov, las autoridades europeas también están intentando acelerar el proceso de retorno de los refugiados sirios de Europa a sus hogares, pero dados los problemas de seguridad, no es algo que se pueda esperar. Belov cree que, una vez levantadas las sanciones de la UE, es poco probable que las empresas europeas participen activamente en proyectos económicos en Siria debido a los riesgos de seguridad.

El levantamiento de las sanciones de Estados Unidos y la UE tendrá sin duda un impacto positivo en el aumento de la actividad económica, lo que repercutirá en el proceso de recuperación de la economía siria, dijo Murad Sadygzade, presidente del Centro de Estudios sobre Oriente Medio. Hasta ahora, la reactivación económica, comentó el experto, se ha visto impulsada por el dinero catarí: los fondos cataríes están proporcionando ahora ayuda humanitaria a los ciudadanos locales. No obstante, el problema de la seguridad y la falta de estabilidad política siguen siendo un obstáculo para la aceleración de la recuperación económica en Siria, indicó el experto.

Rossiyskaya Gazeta: ¿Qué podrían hacer EE.UU. y la UE si fracasan las negociaciones sobre Ucrania?

Si Estados Unidos considera que el proceso de negociación sobre la cuestión ucraniana ha llegado a un punto muerto, el presidente Donald Trump promete imponer sanciones fuertes contra Rusia. El Senado estadounidense incluso tiene listo un proyecto de ley, según el cual impondrá aranceles del 500% contra las mercancías de los países que compren petróleo, productos derivados del petróleo, gas, carbón y uranio a Rusia. Tal medida no es solo una prohibición de facto de nuestras exportaciones, sino al mismo tiempo sanciones secundarias contra los importadores de materias primas energéticas de Rusia. Sin embargo, los expertos entrevistados por Rossiyskaya Gazeta dudan de que Trump se arriesgue a imponer tales restricciones.

Según Konstantín Símonov, director del Fondo Nacional de Seguridad Energética, de momento no se impondrán sanciones. La posición de Trump es que es necesario no perder la oportunidad de llegar a un acuerdo con Rusia. Si esto no funciona, solo entonces se pueden esperar nuevas restricciones. Las sanciones de la UE pueden ignorarse, pero no las de EE UU. China seguirá comprando petróleo ruso, pero lo eliminará de las estadísticas. "No me sorprendería que Malasia, por ejemplo, se convirtiera en el principal exportador de petróleo a China por este motivo. India es más cautelosa, puede efectivamente reducir las importaciones de petróleo de Rusia. Pero los aranceles para los compradores de petróleo ruso son una medida bastante arriesgada para el propio Estados Unidos", dijo el experto. 

Según Valeri Andriánov, profesor asociado de la Universidad de Finanzas del Gobierno de Rusia, es poco probable que China e India se nieguen a comprar recursos energéticos rusos, ya que representan una parte importante de su balance energético (y en India, Rusia es el principal proveedor de petróleo). Las sanciones solo tienen sentido cuando son viables en la práctica. Si su aplicación conlleva graves trastornos económicos y supera el efecto de las sanciones secundarias estadounidenses, entonces serán ignoradas. Algo similar ha ocurrido ya en el caso de los aranceles estadounidenses a las importaciones chinas: da igual que sean del 30% o del 145%. Se trata de un nivel prohibitivo, que implica la paralización total del comercio entre ambos países. Washington, consciente de ello, ha dado marcha atrás. Lo mismo ocurre con las amenazas de imponer un arancel del 500% a los países que compren petróleo a Rusia. Suena y parece impresionante, pero también carece de sentido.

Natalia Milchakova, destacada analista de Freedom Finance Global, coincide con esto y subraya que la adopción de tales medidas supondría una anulación completa de los acuerdos mutuos entre EE.UU. y China sobre reducción de aranceles. Y esto podría desencadenar una respuesta muy sensible por parte de Pekín. Incluida, teóricamente, la venta de todo el paquete de bonos del Estado de EE.UU., que China posee actualmente (USD 765.000 millones).

Como resultado, Trump puede utilizar la idea de la UE de bajar el techo de precios del petróleo ruso como opción de reserva para "salvar la cara". La medida es ineficaz, pero llama mucho la atención. Según Milchakova, las autoridades estadounidenses mantienen "sobre la mesa" por si acaso la cuestión de rebajar el precio máximo, para tener una forma de presionar a Rusia. Pero tampoco tiene sentido práctico, ya que el petróleo Urals ya se negocia con descuento. Con el nivel de Brent de 60 dólares por barril, el Urals ruso se venderá a 50 dólares por barril, es decir, al precio tope. Lo negativo para Rusia será una disminución de los ingresos por petróleo y gas, que solo podrá compensarse debilitando el rublo a 100 rublos por dólar y más.

Vedomosti: ¿Se acercarán Pekín e Islamabad tras el conflicto de Pakistán con India?

El ministro de Asuntos Exteriores de Pakistán, Ishaq Dar, se encuentra en China del 19 al 21 de mayo. Es su primer viaje al extranjero tras la reciente escalada de tensión con India. El canciller chino, Wang Yi, que se reunió con él, declaró que Pekín "apoya los esfuerzos de Pakistán e India para resolver las diferencias a través del diálogo y el logro de un alto el fuego a largo plazo".

El periódico South China Morning Post sugiere que uno de los principales temas de discusión entre los dos países amistosos podría ser la profundización de la cooperación en materia de seguridad. Además, es probable que China y Pakistán sigan coordinándose sobre los posibles escenarios del conflicto regional, que hasta ahora se ha mantenido bajo control. Además, Pekín está planeando una nueva reunión trilateral con el ministro afgano de Asuntos Exteriores en funciones, Amir Jan Muttaqi.

Dado que el conflicto entre India y Pakistán fue bastante intenso, Islamabad se enfrenta ahora a la cuestión de reponer sus reservas militares, afirma Vasili Kashin, director del Centro de Estudios Europeos e Internacionales Integrados de la Escuela Superior de Economía de Rusia. Pakistán, señala el experto, sufrió pérdidas en equipamiento militar durante el conflicto, y es muy posible que fueran considerables. Por lo tanto, Kashin asegura que son inevitables nuevos contratos entre China y Pakistán en el ámbito de la cooperación técnico-militar, por ejemplo, en materia de defensa antiaérea, drones, etc.; y la probada eficacia de las armas chinas puede llevar a un exceso de pedidos. La cuestión es si Islamabad dispone de los recursos necesarios.

China y Pakistán siempre tienen una agenda muy amplia y, por supuesto, la cooperación técnico-militar entre ambos países será uno de los temas de discusión ahora, afirma Gleb Makarévich, investigador del Centro Indo-Pacífico del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales de la Academia de Ciencias de Rusia. Pero incluso el nivel de cooperación estratégica "de todo tiempo" entre Pakistán y China no convierte a Pekín en parte en el conflicto, señala el experto. Pakistán quiere seguir cooperando con China, lo que no significa su apoyo directo en el enfrentamiento con India.

Al mismo tiempo, Makarévich admite que la percepción de Pakistán en los círculos de élite indios es diferente: existe la opinión generalizada de que Islamabad es una de las fuerzas "proxy" de China en la región. El proceso de normalización de las relaciones entre Nueva Delhi y Pekín se ha ralentizado tras la cumbre de los BRICS celebrada en la ciudad rusa de Kazán en otoño boreal de 2024 (donde los líderes de los Estados mantuvieron un encuentro personal que permitió volver a la posición anterior a la escalada del conflicto fronterizo entre China e India en 2020 - referencia de Vedomosti), subraya el analista. Según Makarévich, militares indios seguirán señalando el peligro del factor de China en la dimensión regional, mientras que la parte económica de las élites se mostrará a favor del comercio y la inversión, y está por ver qué opinión prevalecerá al final.

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