Maravilloso es el gran amor
Volver a Directorio de cantos | Iglesia Presbiteriana Gracia SoberanaMaravilloso es el gran amor que Cristo el Salvador derramó en mí;
siendo rebelde y pecador, yo de Su muerte causa fui.
¡Grande, sublime, inmensurable amor! Por mí murió el Salvador.
¡Oh maravilla de Su amor, por mí murió el Salvador!
El trono de Su Padre Él dejó, Su gracia infinita nos mostró;
y como hombre Jesús nació; Su sangre vertió por el pecador.
Misericordia inmensa Él mostró, Su gran amor me alcanzó.
¡Grande misterio! Dios el inmortal muriendo en la cruz entregó Su ser.
Ni mente humana ni angelical jamás lo puede comprender.
Inexplicable es el infinito amor que demostró mi Salvador.
En vil prisión mi alma padeció, atada en pecado y oscuridad;
pronto en mi celda resplandeció la clara luz de Su verdad.
Cristo las férreas cadenas destruyó, quedé ya libre ¡Gloria a Dios!
Hoy ya no temo la condenación, Jesús es mi Señor, y yo Suyo soy.
Vivo en Él que es mi salvación, vestido en Su justicia voy.
Libre acceso al Padre gozo ya y entrada al trono celestial.