Lucrarse con el genocidio

La guerra es un negocio. El genocidio también. El último informe presentado por Francesca Albanese, Relatora Especial de la ONU para los Territorios Palestinos Ocupados, enumera 48 corporaciones e instituciones —incluidas Palantir Technologies Inc., Lockheed Martin, Alphabet Inc. (Google), Amazon, International Business Machine Corporation (IBM), Caterpillar Inc., Microsoft Corporation y el Massachusetts Institute of Technology (MIT), junto con bancos y firmas financieras como Blackrock, aseguradoras, inmobiliarias y organizaciones benéficas— que, violando el derecho internacional, están obteniendo miles de millones de la ocupación y el genocidio de los palestinos.

El informe, que incluye una base de datos de más de 1.000 entidades corporativas que colaboran con Israel, exige que estas empresas e instituciones corten sus vínculos con Israel o sean consideradas cómplices de crímenes de guerra. Describe la "ocupación eterna" de Israel como "el campo de pruebas ideal para los fabricantes de armas y las grandes tecnológicas, al ofrecer una oferta y demanda significativas, poca supervisión y cero rendición de cuentas, mientras inversores e instituciones públicas y privadas obtienen beneficios libremente".

Los juicios a industriales tras el Holocausto y la Comisión de la Verdad y la Reconciliación de Sudáfrica sentaron el marco legal para reconocer la responsabilidad penal de instituciones y empresas que participan en crímenes internacionales. Este nuevo informe deja claro que las decisiones de la Corte Internacional de Justicia obligan a las entidades "a no participar y/o a retirarse total e incondicionalmente de cualquier trato asociado, y a garantizar que cualquier interacción con los palestinos permita su autodeterminación".

"El genocidio en Gaza no se ha detenido porque es lucrativo, es rentable para demasiados", me dijo Albanese. "Es un negocio. Hay entidades corporativas, incluso de estados amigos de Palestina, que durante décadas han hecho negocios y obtenido beneficios de la economía de la ocupación. Israel siempre ha explotado la tierra palestina, los recursos y la vida palestina. Los beneficios han continuado e incluso aumentado a medida que la economía de la ocupación se transformaba en una economía de genocidio."

Además, señaló, los palestinos han proporcionado "campos de entrenamiento ilimitados para probar tecnologías, probar armas, probar técnicas de vigilancia que ahora se utilizan contra personas en todas partes, desde el Sur Global hasta el Norte Global".

Puedes ver mi entrevista con Albanese aquí.

El informe critica a las corporaciones por "proporcionar a Israel las armas y maquinaria necesarias para destruir hogares, escuelas, hospitales, lugares de ocio y culto, medios de subsistencia y activos productivos, como olivares y huertos".

El territorio palestino, señala el informe, es un "mercado cautivo" debido a las restricciones impuestas por Israel al comercio y la inversión, la plantación de árboles, la pesca y el agua para las colonias. Las corporaciones se han lucrado de este "mercado cautivo" "explotando mano de obra y recursos palestinos, degradando y desviando recursos naturales, construyendo y energizando colonias y vendiendo y comercializando bienes y servicios derivados en Israel, el territorio palestino ocupado y a nivel mundial".

"Israel se beneficia de esta explotación, mientras que le cuesta a la economía palestina al menos el 35% de su PIB", señala el informe.

Bancos, gestoras de activos, fondos de pensiones y aseguradoras han "canalizado financiación hacia la ocupación ilegal", acusa el informe. Además, "las universidades —centros de crecimiento intelectual y poder— han sostenido la ideología política que sustenta la colonización de la tierra palestina, desarrollado armamento y pasado por alto o incluso avalado la violencia sistémica, mientras que las colaboraciones globales de investigación han ocultado el borrado palestino tras un velo de neutralidad académica".

Las tecnologías de vigilancia y encarcelamiento han "evolucionado hacia herramientas para el ataque indiscriminado de la población palestina", señala el informe. "La maquinaria pesada utilizada anteriormente para demoliciones de viviendas, destrucción de infraestructuras y confiscación de recursos en Cisjordania ha sido reutilizada para arrasar el paisaje urbano de Gaza, impidiendo que las poblaciones desplazadas regresen y se reconozcan como comunidad".

El asalto militar a los palestinos también ha "proporcionado campos de prueba para capacidades militares de vanguardia: plataformas de defensa aérea, drones, herramientas de selección de objetivos impulsadas por inteligencia artificial e incluso el programa F-35 liderado por Estados Unidos. Estas tecnologías luego se comercializan como 'probadas en combate'".

Desde 2020, Israel es el octavo mayor exportador de armas del mundo. Sus dos mayores empresas de armamento son Elbit Systems Ltd y la estatal Israel Aerospace Industries Ltd (IAI). Tiene una serie de asociaciones internacionales con empresas de armas extranjeras, incluidas "para el caza F-35, liderado por Lockheed Martin, con sede en Estados Unidos".

"Componentes y piezas construidos globalmente contribuyen a la flota israelí de F-35, que Israel personaliza y mantiene en asociación con Lockheed Martin y empresas nacionales", dice el informe. Desde octubre de 2023, los aviones F-35 y F-16 han sido "parte integral para equipar a Israel con un poder aéreo sin precedentes para lanzar un estimado de 85.000 toneladas de bombas, gran parte sin guía, matando e hiriendo a más de 179.411 palestinos y arrasando Gaza".

"Los drones, hexacópteros y cuadricópteros también han sido máquinas asesinas omnipresentes en los cielos de Gaza", dice el informe. "Los drones, desarrollados y suministrados en gran parte por Elbit Systems e Israel Aerospace Industries, han volado durante mucho tiempo junto a aviones de combate, vigilando a los palestinos y proporcionando inteligencia sobre objetivos. En las últimas dos décadas, con el apoyo de estas empresas y colaboraciones con instituciones como el Massachusetts Institute of Technology, los drones utilizados por Israel adquirieron sistemas de armas automatizados y la capacidad de volar en formación de enjambre".

Las empresas japonesas FANUC venden productos de automatización y "proporcionan maquinaria robótica para líneas de producción de armas, incluidas las de IAI, Elbit Systems y Lockheed Martin".

"Empresas navieras como la danesa A.P. Moller — Maersk A/S transportan componentes, piezas, armas y materias primas, sosteniendo un flujo constante de equipamiento militar suministrado por Estados Unidos después de octubre de 2023".

Hubo un "aumento del 65% en el gasto militar israelí de 2023 a 2024, ascendiendo a 46.500 millones de dólares, uno de los más altos per cápita del mundo". Esto "generó un fuerte aumento en sus beneficios anuales", mientras que "las empresas armamentísticas extranjeras, especialmente los productores de municiones y artillería, también se benefician".

Al mismo tiempo, las empresas tecnológicas se han beneficiado del genocidio "proporcionando infraestructura de doble uso para integrar la recopilación masiva de datos y la vigilancia, al tiempo que se lucran del campo de pruebas único para tecnología militar que ofrece el territorio palestino ocupado". Mejoran "los servicios carcelarios y de vigilancia, desde redes de circuito cerrado de televisión (CCTV), vigilancia biométrica, redes avanzadas de puntos de control tecnológicos, 'muros inteligentes' y vigilancia con drones, hasta computación en la nube, inteligencia artificial y análisis de datos que apoyan al personal militar sobre el terreno".

"Las empresas tecnológicas israelíes a menudo surgen de la infraestructura y estrategia militar", dice el informe, "como lo hizo el Grupo NSO, fundado por exmiembros de la Unidad 8200. Su software espía Pegasus, diseñado para la vigilancia encubierta de teléfonos inteligentes, se ha utilizado contra activistas palestinos y se ha licenciado globalmente para atacar a líderes, periodistas y defensores de derechos humanos. Exportada bajo la Ley de Control de Exportaciones de Defensa, la tecnología de vigilancia del grupo NSO permite la 'diplomacia del software espía' mientras refuerza la impunidad estatal".

IBM, cuya tecnología facilitó la generación y tabulación de tarjetas perforadas para el censo nacional, la logística militar, las estadísticas de guetos, la gestión del tráfico ferroviario y la capacidad de los campos de concentración en la Alemania nazi, es una vez más socia en este genocidio actual.

Opera en Israel desde 1972. Proporciona formación a agencias militares y de inteligencia israelíes, especialmente a la Unidad 8200, responsable de operaciones clandestinas, recopilación de inteligencia de señales y descifrado de códigos, junto con contrainteligencia, guerra cibernética, inteligencia militar y vigilancia.

"Desde 2019, IBM Israel opera y actualiza la base de datos central de la Autoridad de Población e Inmigración, permitiendo la recopilación, almacenamiento y uso gubernamental de datos biométricos sobre palestinos, y apoyando el régimen discriminatorio de permisos de Israel", señala el informe.

Microsoft, activa en Israel desde 1989, está "integrada en el servicio penitenciario, la policía, universidades y escuelas, incluidas las de colonias. Microsoft ha estado integrando sus sistemas y tecnología civil en el ejército israelí desde 2003, mientras adquiere startups israelíes de ciberseguridad y vigilancia".

"A medida que el apartheid israelí y sus sistemas de control militar y poblacional generan volúmenes crecientes de datos, su dependencia del almacenamiento en la nube y la computación ha crecido", dice el informe. "En 2021, Israel otorgó a Alphabet Inc. (Google) y Amazon.com, Inc. un contrato de 1.200 millones de dólares (Proyecto Nimbus), financiado en gran parte por gastos del Ministerio de Defensa, para proporcionar infraestructura tecnológica central".

Microsoft, Alphabet Inc. y Amazon "otorgan a Israel un acceso prácticamente gubernamental a sus tecnologías de nube e inteligencia artificial, mejorando las capacidades de procesamiento de datos, toma de decisiones, vigilancia y análisis".

El ejército israelí, señala el informe, "ha desarrollado sistemas de inteligencia artificial como 'Lavender', 'Gospel' y 'Where’s Daddy?' para procesar datos y generar listas de objetivos, remodelando la guerra moderna e ilustrando la naturaleza de doble uso de la inteligencia artificial".

Existen "motivos razonables", dice el informe, para creer que Palantir Technology Inc., que tiene una larga relación con Israel, "ha proporcionado tecnología predictiva policial automática, infraestructura central de defensa para la construcción rápida y a gran escala y el despliegue de software militar, y su Plataforma de Inteligencia Artificial, que permite la integración de datos del campo de batalla en tiempo real para la toma de decisiones automatizada".

El CEO de Palantir en abril de 2025 respondió a las acusaciones de que Palantir mata palestinos en Gaza diciendo: "en su mayoría terroristas, eso es cierto".

"Las tecnologías civiles han servido durante mucho tiempo como herramientas de doble uso para la ocupación colonial de colonos", dice el informe. "Las operaciones militares israelíes dependen en gran medida de equipos de los principales fabricantes mundiales para 'desarraigar' a los palestinos de su tierra, demoliendo hogares, edificios públicos, tierras de cultivo, carreteras y otra infraestructura vital. Desde octubre de 2023, esta maquinaria ha sido fundamental para dañar y destruir el 70% de las estructuras y el 81% de las tierras de cultivo en Gaza".

Caterpillar Inc. ha proporcionado durante décadas al ejército israelí equipos utilizados para demoler hogares palestinos, mezquitas, hospitales, así como "enterrar vivos a palestinos heridos", y matar a activistas como Rachel Corrie.

"Israel ha evolucionado la excavadora D9 de Caterpillar hacia un armamento central automatizado y de mando remoto del ejército israelí, desplegado en casi todas las actividades militares desde 2000, despejando líneas de incursión, 'neutralizando' el territorio y matando palestinos", dice el informe. Este año, Caterpillar "aseguró un contrato adicional multimillonario con Israel".

"La coreana HD Hyundai y su subsidiaria parcialmente propiedad, Doosan, junto con el grupo sueco Volvo y otros importantes fabricantes de maquinaria pesada, han estado vinculados durante mucho tiempo a la destrucción de propiedades palestinas, cada uno suministrando equipos a través de distribuidores israelíes con licencia exclusiva", dice el informe.

"Mientras los actores corporativos han contribuido a la destrucción de la vida palestina en el territorio palestino ocupado, también han ayudado a la construcción de lo que la reemplaza: construir colonias y su infraestructura, extraer y comercializar materiales, energía y productos agrícolas, y traer visitantes a las colonias como si fuera un destino vacacional regular".

"Más de 371 colonias y puestos avanzados ilegales han sido construidos, energizados y comercializados por empresas que facilitan el reemplazo por parte de Israel de la población indígena en el territorio palestino ocupado", concluye el informe.

Estos proyectos de construcción han utilizado excavadoras y equipos pesados de Caterpillar, HD Hyundai y Volvo. Hanson Israel, subsidiaria de la alemana Heidelberg Materials AG, "ha contribuido al saqueo de millones de toneladas de roca dolomita de la cantera de Nahal Raba en tierras confiscadas a aldeas palestinas en Cisjordania". La dolomita extraída se utiliza para construir colonias judías en Cisjordania.

Las empresas extranjeras también han "contribuido a desarrollar carreteras e infraestructura de transporte público cruciales para establecer y expandir las colonias, y conectarlas con Israel mientras excluyen y segregan a los palestinos".

Las empresas inmobiliarias globales venden propiedades en asentamientos coloniales a compradores israelíes e internacionales. Estas firmas inmobiliarias incluyen Keller Williams Realty LLC, que "ha tenido sucursales en las colonias" a través de su franquiciado israelí KW Israel. El año pasado, a través de otro franquiciado llamado Home in Israel, Keller Williams "realizó una gira inmobiliaria en Canadá y Estados Unidos, patrocinada conjuntamente con varias empresas que desarrollan y comercializan miles de apartamentos en colonias".

Las plataformas de alquiler, incluidas Booking.com y Airbnb, listan propiedades y habitaciones de hotel en colonias judías ilegales en Cisjordania.

La china Bright Dairy & Food es propietaria mayoritaria de Tnuva, el mayor conglomerado alimentario de Israel, que utiliza tierras confiscadas a palestinos en Cisjordania.

En el sector energético, "Chevron Corporation, en consorcio con la israelí NewMedEnergy (una subsidiaria del Grupo Delek, listado en la base de datos de la ONU), extrae gas natural de los yacimientos de Leviathan y Tamar; pagó al Gobierno de Israel 453 millones de dólares en regalías e impuestos en 2023. El consorcio de Chevron suministra más del 70% del consumo energético israelí. Chevron también obtiene beneficios de su copropiedad del gasoducto East Mediterranean Gas, que pasa por territorio marítimo palestino, y de las ventas de exportación de gas a Egipto y Jordania".

BP y Chevron también sirven como "los mayores contribuyentes a las importaciones israelíes de crudo, como principales propietarios del estratégico oleoducto Azerí Bakú-Tiflis-Ceyhan y del consorcio oleoducto Caspiano de Kazajistán, respectivamente, y de sus campos petrolíferos asociados. Cada conglomerate suministró efectivamente el 8% del crudo israelí entre octubre de 2023 y julio de 2024, complementado por envíos de crudo de campos petrolíferos brasileños, en los que Petrobras tiene las mayores participaciones, y combustible para aviones militares. El petróleo de estas empresas abastece a dos refinerías en Israel".

"Al suministrar a Israel carbón, gas, petróleo y combustible, las empresas están contribuyendo a infraestructuras civiles que Israel utiliza para afianzar la anexión permanente y ahora emplea como arma en la destrucción de la vida palestina en Gaza", dice el informe. "La misma infraestructura a la que estas empresas suministran recursos ha servido al ejército israelí y a su obliteración de Gaza impulsada por tecnología e intensiva en energía".

Los bancos y firmas financieras internacionales también han sostenido el genocidio mediante la compra de bonos del tesoro israelíes.

"Como principal fuente de financiación del presupuesto estatal israelí, los bonos del tesoro han jugado un papel crítico en financiar el asalto continuo a Gaza", dice el informe. "De 2022 a 2024, el presupuesto militar israelí creció del 4,2% al 8,3% del PIB, llevando al presupuesto público a un déficit del 6,8%. Israel financió este presupuesto en aumento incrementando su emisión de bonos, incluyendo 8.000 millones de dólares en marzo de 2024 y 5.000 millones en febrero de 2025, junto con emisiones en su mercado interno de nuevos shekels".

El informe señala que algunos de los bancos más grandes del mundo, incluidos BNP Paribas y Barclays, "intervinieron para impulsar la confianza del mercado al suscribir estos bonos del tesoro internacionales y domésticos, permitiendo a Israel contener la prima de tasa de interés, a pesar de una rebaja crediticia. Las gestoras de activos, incluidas Blackrock (68 millones de dólares), Vanguard (546 millones) y la subsidiaria de gestión de activos de Allianz, PIMCO (960 millones), estuvieron entre al menos 400 inversores de 36 países que los compraron".

Las organizaciones benéficas confesionales también se han convertido en "facilitadores financieros clave de proyectos ilegales, incluso en el territorio palestino ocupado, a menudo recibiendo deducciones fiscales en el extranjero a pesar de estrictos marcos regulatorios benéficos", dice el informe.

"El Fondo Nacional Judío (KKL-JNF) y sus más de 20 filiales financian la expansión de colonos y proyectos vinculados al ejército", dice el informe. "Desde octubre de 2023, plataformas como Israel Gives han permitido el crowdfunding con deducción fiscal en 32 países para unidades militares israelíes y colonos. Christian Friends of Israeli Communities, con sede en EE.UU., Dutch Christians for Israel y filiales globales, enviaron más de 12,25 millones de dólares en 2023 a varios proyectos que apoyan colonias, incluyendo algunos que entrenan a colonos extremistas".

El informe critica a universidades que se asocian con universidades e instituciones israelíes. Señala que laboratorios del MIT "realizan investigaciones de armas y vigilancia financiadas por el Ministerio de Defensa israelí". Estos proyectos incluyen "control de enjambres de drones —una característica distintiva del asalto israelí a Gaza desde octubre de 2023—, algoritmos de persecución y vigilancia submarina".

Puedes ver mi entrevista con los estudiantes del MIT que expusieron la colaboración entre la universidad y el ejército israelí aquí.

El genocidio requiere una vasta red y miles de millones de dólares para sostenerlo. Israel no podría llevar a cabo su matanza masiva de palestinos sin este ecosistema. Estas entidades, que se benefician de la violencia industrial contra los palestinos y el desplazamiento masivo, son tan culpables de genocidio como las unidades militares israelíes que diezman a la gente en Gaza. También son criminales de guerra. También deben rendir cuentas.

Fuente: https://x.com/ChrisLynnHedges/status/1940547986523934773