La supervivencia del más fuerte

"Quita las comillas del título. Déjalo como una declaración. La supervivencia del más fuerte no es una cita, es un hecho". - (El Señor Jesucristo)

"Dígales que esta vacuna los matará y que yo lo he dicho. Esto es un experimento social". (- El Señor Jesucristo)

Quiero registrar lo que el Señor me ha mostrado. Quiero ser fiel. Llevo unos días queriendo escribirlo, pero no me ha salido el momento. Este es un registro fiel de cosas que el Padre Celestial me ha dicho recientemente, nuevas revelaciones en una conversación que he tenido con Él todo el año. No hablaba de este virus si no era sobre la profecía, pero ahora comparto parte de esa conversación en curso que grabé. Estamos en una línea de tiempo del Nuevo Orden Mundial.

Hace unos días, tal vez el 22 o 23 de diciembre, el Señor me habló sobre la vacuna Covid 19. La conversación fue muy contundente y me asustó, recuerdo que me cubrí la cara varias veces mientras Él hablaba. Sentí verdadero miedo y no voy a mentir al respecto. El Señor me estaba revelando cosas usando metáforas con las que estoy familiarizado, cosas que entendería fácilmente. Creo que por eso mi corazón se dirigió a Él: me habló sin rodeos de una manera de la que no podía esconderme ni fingir que no sabía lo que decía.

Dios me dijo que el pueblo celestial tendrá grandes problemas y morirá por esta vacuna. Habrá una gran ola de muerte y destrucción a raíz de esta vacuna y después habrá una gran lucha y resistencia cuando todo el mundo vea que el Nuevo Orden Mundial queda expuesto por primera vez. ¿Sabes cómo son los animales en la selva? ¿Por ejemplo, los leones? Por ejemplo, los leones se mueven en manada. Son un grupo familiar y están muy unidos, trabajan juntos, pero algunos en la manada llevan más tiempo que otros. Algunos envejecen y mueren, otros nacen, así que el orgullo se renueva. Pero los que viven más tiempo obedecen a la ley de la supervivencia del más apto.

(Cuando Dios dijo esto, mi corazón se apretó, ni siquiera sabía por qué tenía miedo, pero creo que puedo explicarlo así: El Espíritu de Dios a veces puede hablar sin rodeos. Puede tener un modo de hablar clínico, "sin tonterías", que te dice hacia dónde va la conversación mucho antes de que llegue. Este fue uno de esos casos en los que sentí que ya conocía el final de la historia, a pesar de que aún no había empezado a contarla).

En la supervivencia del más fuerte, hay varias posibilidades. Se trata del tamaño: quién es el más grande, el más fuerte y el mejor luchador. La ferocidad cuenta. A veces también se trata del CORAZÓN: ganará el que esté más decidido y no se rinda. Pero a menudo también se trata de la SABIDURÍA. La sabiduría es la supervivencia del más fuerte. Gracias a la sabiduría, un animal vive mucho tiempo. Ha visto todas las cosas que han matado a su especie, sabe lo que ha matado a sus amigos y enemigos, y viendo estas cosas, un animal aprende qué hacer y qué no hacer en la selva. Así que cuando ves a un animal que vive mucho tiempo, no son sólo los que saben luchar o los que no se rinden, son los que tienen más sentido común los que viven más tiempo.

En ese momento comprendí lo que Dios estaba tratando de decirme. Me asustaba pensar en cómo se desarrollaría la realidad en nuestro tiempo, pero siguió hablando y dejándolo claro.

Muchos, muchos e incalculables millones de personas -a pesar de los comentarios en vivo de lo contrario, que les advierten y amonestan de lo contrario- elegirán esta vacuna. Han visto advertencias, han visto cosas y resultados extraños en la televisión, han oído historias, han escuchado "informes", han recibido mensajes de texto urgentes de amigos, familiares y seres queridos, todos ellos aconsejándoles que no tomen esta vacuna. Incluso han sentido la punzada y el pinchazo de una intuición, un cierto "algo" que no les deja descansar por la noche mientras están tumbados en la cama sopesando los pros y los contras de esta decisión. Sin embargo, a pesar de todos estos factores -a pesar de los testimonios en vivo de personas que dicen: "Esto me ha hecho daño", a pesar de los testimonios de familiares que dicen: "No creo que esto se haya probado lo suficiente, deberíamos esperar"-, a pesar de los muchos factores que actúan sobre ellos, y a pesar de todos los esfuerzos de sus respectivos entornos para indicarles que no es una buena decisión, se vacunarán. Este grupo se llamará "LA PRIMERA OLA".

Mientras el Señor hablaba, vi una gran masa de gente de pie sobre una alfombra; la alfombra era exactamente igual al mapa del mundo: azul para los mares, verde para los árboles, marrón rojizo para la tierra. Estaban todos de frente, y los vi desde arriba y desde atrás, mirando sus espaldas desde un ángulo alto. Vi que ocurría algo, como un movimiento mecánico -pareció y se sintió como si se hubiera tirado de una palanca en alguna parte- y cuando eso ocurrió, la alfombra se movió y la gente se separó. Un gran y ENORME número de personas se separó del grupo general y avanzó. Se movieron como un solo hombre, todos dieron un paso adelante y esto los separó del resto de las personas que permanecían de pie en la alfombra.

El Señor dijo que las personas que NO tienen la mentalidad de "supervivencia del más fuerte" morirán en gran número. Seguirán adelante pensando que son más sabios, más inteligentes y mejores que los demás; se creerán "valientes", "pioneros" y muchas otras cosas si se vacunan. Se considerarán mejores y más prudentes que los que aún no se han vacunado, y se considerarán más valientes que los que dicen rotundamente que nunca se vacunarán. Se darán palmaditas en la espalda por "anteponer la seguridad", pero les digo que sufrirán enfermedades atroces y terribles complicaciones tanto ahora como en el futuro. El daño que se hacen a sí mismos será irrevocable. Serán atrapados en una red, y esta red se llama "Primera Ola". Nunca podrán deshacer lo que se harán a sí mismos con esta vacuna.

En ese momento, mi corazón dio un salto. Dije: "Pero Señor. ¡Esta vacuna ya está creada! No se puede revertir. Dijiste que todos tenemos que tomarla. Pero si un grupo suficientemente grande de personas se ve perjudicado por ella, el resto de nosotros verá lo que les ocurre, ¡y nos negaremos a aceptarlo! Nos negaremos, lucharemos, nos inquietaremos en todo el mundo, y entonces ¿qué pasará? Sabrán que sabemos lo que se traen entre manos y no conseguirán que nadie más se presente y se lo lleve.

Entonces tuve una segunda visión.

Vi un grupo de elefantes 🐘 alrededor de una charca y estaban hablando. Los había de todos los tamaños y edades: enormes elefantes grises, medianos y pequeños, algunos marchitos con un millón de arrugas, otros aún más viejos, tanto que su piel tenía una costra blanca en las arrugas, y otros con la piel lisa, por lo que supe que eran adolescentes y bebés. Todos estos elefantes estaban de pie en el bosque, en la cima de una pequeña colina, hablando; todos escuchaban y hablaban juntos, porque era una conversación importante.

El elefante más viejo dijo: "Te digo que lo he visto cien veces. Hay cocodrilos en esa agua. Viven allí, duermen allí, y han arrancado más animales al lago de los que puedo contar y los han matado. No vayas a ese agujero a beber, vamos a otro sitio a por agua".

Esta afirmación causó un gran revuelo entre los elefantes, las trompetas sonaron por todas partes porque todos tenían una opinión sobre lo que dijo el elefante mayor. Algunos elefantes dijeron: "¡Esto es ridículo! ¿Quién ha oído hablar de un cocodrilo que vive en el agua?" Algunos dijeron pensativos: "Bueno, sí que viven allí, pero yo he estado muchas veces en ese agujero y nunca he tenido problemas". Alguien preguntó: "¿Qué es una madre cocodrilo?" Y algunos dijeron: "Nunca tendré sed para beber de ese agujero, soy del viejo. Estoy fuera de la cuestión".

La conversación iba de un lado a otro, y todos miraban la colina hacia el agua azul que brillaba bajo la luz del sol. A pesar de que tantos animales grandes trompeteaban a la vez y hacían mucho ruido, escuché al único elefante mayor repetir tranquilamente lo que había dicho:

"Los cocodrilos viven en esta agua. Esperan en la orilla. Se abalanzan sobre los animales y los arrastran de cabeza al agua cuando quieren beber. He visto a gente morir allí. No bebamos allí, bebamos en otro sitio".

Finalmente, se tomó una decisión. Más o menos. Un joven elefante de mediana edad dijo que quería beber porque sabía que los cocodrilos no saldrían durante el día. El agujero era el derecho de nacimiento de los elefantes, podían beber de él si querían. No había ninguna razón para hacerles caminar una milla hasta otra charca cuando había una muy buena charca aquí mismo. Bajó al agua y el Señor me dijo: "Vigila", es decir, que observara con atención lo que iba a suceder a continuación.

Vi tres oleadas de elefantes. La primera oleada aceptó beber del agujero. Los guiaba el valiente elefante y todos bajaron a beber, junto con los que les acompañaban como apoyo moral.

La segunda ola descendió parte de la colina. Tenían curiosidad, algunos nunca habían visto ni oído hablar de un cocodrilo y querían ver si realmente aparecía uno.

La tercera oleada de elefantes (un grupo muy pequeño) estaba formada por el elefante más viejo y todos los que le creían. Este grupo, formado por jóvenes y viejos, se mantuvo en la cima de la colina, pero el elefante más viejo tenía la mirada de alguien que ha visto algo muchas veces y sabe cómo va a bajar.

El primer grupo llegó al agujero y el líder metió su tronco en el agua y bebió. Lo sacó y lo levantó para que todos lo vieran, y luego lo volvió a sumergir. Cuando vio que el agua estaba tranquila y no pasaba nada, sus compañeros de armas se acercaron y bebieron también. Detrás de ellos, la segunda oleada se acercó sigilosamente para ver si todo estaba bien, y así fue. Estaba viendo a los elefantes beber cuando sucedieron varias cosas a la vez.

Las patas delanteras del valiente elefante empezaron a deslizarse hacia el agua mientras su nariz era agarrada y arrastrada por unas mandíbulas de hierro. Gritó y trató de retroceder, pero la nariz de un elefante es una cosa delicada, no había manera de que pudiera arrancarla de la boca del cocodrilo y sobrevivir. El cocodrilo que lo sujetaba se sumergió hasta el fondo del agua y la cabeza del elefante se sumergió por completo y volvió a salir mientras luchaba por su vida. Alrededor de él, otros cocodrilos atacaron - los bebedores fueron capturados. Uno o dos lograron liberarse, pero al final no hubo diferencia. Los hambrientos cocodrilos salieron del agua, agarraron las trompas de los elefantes que bebían y los arrastraron hacia la charca con sus poderosas patas traseras.

La segunda oleada se asustó, algunos incluso intentaron retroceder hacia la colina por miedo, pero los cocodrilos se arremolinaron donde estaban y atraparon a muchos de ellos. Todos fueron arrastrados al agua para ser ahogados, excepto unos pocos que escaparon y se apresuraron a subir la colina.

En la cima, el viejo elefante no se movió. Él y los demás estaban tan lejos que ningún cocodrilo se molestaría en trepar por una pendiente seca para alcanzarlos. Se quedó de pie agitando las orejas, con el aspecto de Mufasa en la Roca del Orgullo, mientras los demás observaban con él la sangrienta escena de abajo, conmocionados y en silencio. Yo, viendo esto en una visión, dije: "Dios, ¿qué estás diciendo?".

Cuando pregunté esto, la visión retrocedió y se congeló en el momento en que el primer elefante fue atrapado: vi su trompa estirada hasta el punto de ruptura en sus garras de hierro, y supe que había visto esta imagen antes. En algún lugar, hace mucho tiempo. Sabía que estaba ante la muerte, y he aquí el porqué.

Es imposible conseguir que un cocodrilo abra sus mandíbulas a menos que se le golpee fuertemente entre los ojos con un tubo de metal. No responden a las patadas ni a ningún otro tipo de dolor a menos que se les golpee brutalmente en ese lugar, porque el dolor cerca de los ojos va directamente al cerebro. El caballero congeló la imagen frente a mí y supe lo que quería decir. El primer elefante ya estaba muerto. Puede que aún estuviera luchando, pero ya estaba marcado para la muerte. Ese elefante tomó decisiones terribles basadas en el orgullo, pero pensó que era sabiduría. Fue la primera ola. Cuando vi la imagen congelada de él luchando contra un cocodrilo que estaba en su elemento, un leviatán mortal jugando en el agua, que le daba toda la ventaja.... No necesitaba que el Señor me dijera nada más.

Hermanos y hermanas, efectivamente habrá una primera oleada. No importa lo que oigas o veas, incluso si tu hermana o tu marido lo aceptan, no te unas a esa ola. Hasta ahora, no he dicho nada al respecto. No seas partidario, no seas curioso, aléjate de ello. No se deje engañar. Sólo esta noche, cuando decidí publicar esta información, vi una mientras buscaba una foto que me hizo comprender por qué Dios utilizó esta parábola, por qué la visión era tan familiar. Es un cuento de la infancia, un libro de Rudyard Kipling llamado "El niño elefante y otras historias justas". La portada del libro de hace tanto tiempo, coincide exactamente con lo que vi en la visión.

El GRAN RESET es un cocodrilo. Están en el agua esperando a cualquiera lo suficientemente imprudente como para descender hasta ellos.

Saben que el resultado final de las vacunaciones masivas tendrá a la gente alborotada, pero ¿saben qué? No les importa. SERÁ DEMASIADO TARDE PARA LA PRIMERA OLEADA.

Dios dijo que no importa lo que las otras olas hagan, la decisión de la primera ola nunca puede ser revertida, y para los arquitectos del Nuevo Orden Mundial, el daño hecho a este grupo seguramente será visto como un GRAN ÉXITO.

No diré más. Esto es lo que el Señor me ha mostrado, así que digo, honra a Dios en todas tus decisiones. No te apoyes en tu propia manera de pensar, sino confía en Él y Él dirigirá tus pasos (Proverbios 3:5-6). Todos tenemos que decidir qué tipo de elefante queremos ser; que Dios te bendiga en tu decisión. ¡Amén!

Texto original: https://the-masters-voice.com/2020/12/29/survival-of-the-fittest-december-22-23-2020/

Canal de YouTube: Blog de la Profecía de la Voz del Maestro: https://www.youtube.com/channel/UCbcV-IwTyG5WjMdWN6mlFiw

Esta revelación como vídeo de YouTube en inglés:

Recuerde que si todavía no está vacunado, ha sobrevivido a la mayor guerra psicológica de la historia de la humanidad. Han estado tramando un plan malvado durante décadas. ¿Te imaginas cuánto tiempo, cuántos recursos y cuánto esfuerzo se ha invertido en esto? Han explorado todas las formas posibles para esclavizar vuestras mentes y conseguir que os vacunéis. Han intentado desmoralizarte corrompiendo la sociedad de todas las formas posibles. Han intentado calumniarte y desensibilizarte con la pornografía. Han intentado atraerte con dinero, regalos y recompensas. Han intentado confundirte y hacerte dudar de tu propia realidad e identidad. Han intentado que pisotees tus propios principios, valores y moral. Incluso han conseguido que tus seres queridos se vuelvan contra ti. Casi todo el mundo ha sentido esto. La mayoría de ellos se han plegado. Pero no lo hiciste. Piensa en toda la debilidad que has atravesado y superado. Nunca has doblado. Todavía no estás vacunado. Todavía tienes sangre pura. Todos sus trucos no han funcionado contigo. A todos los no vacunados, por tanto, les envío un "¡Salud, gente de honor! Mantente firme."

Véase también la revelación de seguimiento sobre esto:

"¡Manos fuera de la vacunación!"

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