La liberación de Kabul. Discusiones con el PKK sobre la Liberación de Afganistán.
Firaz Amargi¿Quién liberará a Afganistán? Después de 20 años de ocupación de la OTAN, es probable que el país vuelva a estar bajo el gobierno de los talibanes durante un tiempo. La destrucción social, cultural y humana de las últimas dos décadas y el horror talibán previsible se comentan en gran medida en el público occidental con sorpresa y desesperanza. Sin embargo, los pueblos de Afganistán, ya sea en el propio país o en la diáspora, se enfrentan con urgencia con la cuestión de cómo pueden liberar su tierra natal del yugo de alianzas militares occidentales o gobernantes islamistas. Esta pregunta afecta a todas las fuerzas democráticas en el Medio Oriente, ya que la importancia cultural, social, política y geostrégica de Afganistán influye en toda la región. En la PKK, se han llevado a cabo discusiones sobre la liberación de Afganistán a partir de la década de 1990, y no han perdido nada de su relevancia a día de hoy. Una mirada a la historia de PKK, por lo tanto, puede ayudar a dar forma al futuro de Afganistán hoy.
Dos internacionalistas de Sindhi en el PKK.
A partir de la década de 1990, más y más internacionalistas se unieron a la PKK. Muchos de ellos vinieron con el objetivo de aprender de la experiencia de PKK para ponerlos en práctica en sus países de origen. Entre los cientos, si no miles, de estos demócratas internacionalistas, turcos, a los árabes, los circasianos, los azerbayanos, los rusos, los alemanes, los armenios y muchos más, fueron dos jóvenes revolucionarios de la región de Sindh que se unieron a las filas del PKK a mediados de la década de 1990. . Durante su estadía de varios meses en la Academia Central de PKK en Damasco, sostenían discusiones intensivas con el líder de PKK Abdullah Ocalan sobre la lucha de PKK, el futuro del socialismo y la situación de los diversos pueblos de Medio Oriente.
Perspectiva de Abdullah Öcalan para Afganistán
En el transcurso de una larga conversación con Abdullah Öcalan, uno de los dos internacionalistas de Sindhi, su nombre de partido en la PKK fue Mazlum, le preguntó por su evaluación de la situación en Afganistán en ese momento. El breve análisis con el que respondió Abdullah Öcalan abarcaron problemas clave y posibles soluciones que son particularmente instructivas hoy: "En primer lugar, debemos afirmar que no existe una ideología revolucionaria en Afganistán. Najibullāh (presidente por entonces de Afganistán) fue completamente dependiente de los soviéticos. Su lucha no se basó sobre el poder de la gente. Su única preocupación era Moscú. Cuando sus relaciones con Moscú se rompieron, él mismo también fue derrocado. Su conexión con la gente era muy débil. Además, no estaba listo para la guerra. Las otras fuerzas en Afganistán tampoco están conectados a la gente. Ellos también han dependido de las políticas que se encuentran lejos de la gente. Así que no están haciendo política para los afganos. Siempre ha sido sobre las antiguas asociaciones tribales y tribus, sobre una vieja ideología. Nunca considerado a todo el pueblo afgano como su base. Por supuesto que eso molestó a la gente. Los talibanes han sabido explotar ese malestar. Pero la fuerza del talibán es también el resultado de sus relaciones con fuerzas externas. Ahora atraerán el apoyo de los Estados Unidos y Pakistán. Quieren desarrollar una alternativa islámica, que es totalmente posible. Si una organización guerrillera revolucionaria se hubiera desarrollado en Afganistán, habría podido lograr hitos muy importantes. Las razones por las que esto no sucedió son realmente una gran tragedia. Si hubiera habido un partido allí que siguiese una línea similar a la de la PKK, se habrían conseguido cosas muy importantes en Afganistán. Esa es la principal debilidad. Los problemas en Afganistán no se resolverán actuando como hasta ahora. Así esos problemas sólo se harán más grandes y más grandes y continuarán y seguirán creciendo. Por lo tanto, nuestra ideología y política está completamente a favor de nuestra gente y de todos los pueblos del Medio Oriente. La situación actual de nuestra gente sirve a los otros pueblos. Si el PKK está realmente representado correctamente, se convertirá en una fuerza alternativa muy importante en la zona. Si hubiéramos tenido la oportunidad, habríamos construído un grupo asociado con el partido que podría haber desempeñado un papel fundamental [en Afganistán]. Ahora, por supuesto, esa oportunidad ha pasado. Pero debemos seguir trabajando en ello. ¿Por qué? Porque no hay otra opción. Sus errores y debilidades fueron la tragedia definitiva de Najibullāh. Ha estado en su protección durante cuatro años. Hay tantos refugios en Afganistán, ¿por qué buscó refugio allí [Un centro de la ONU en Kabul]? Es por eso que están actualmente en esta situación. Nunca se han relacionado con la gente de Afganistán y nunca han vivido en Afganistán. Siempre han vivido en otros lugares. Sí, esta es su situación actual. Por supuesto, esto es triste ".
Esperanza para Afganistán
Los comentaristas políticos en los representantes del oeste o de la OTAN pueden mostrar actualmente perplejidad y pesimismo frente a las cámaras de este mundo cuando se le pregunta sobre Afganistán. Esa desesperanza es poco útil para la gente de Afganistán, está claro para todas las personas con conciencia política y moral. En consecuencia, hoy es crucial para las mujeres, la juventud y los pueblos de Afganistán establecer la construcción de su patria sobre la esperanza. El PKK ha ofrecido a los internacionalistas la oportunidad de aprender de sus experiencias durante décadas. Entonces, lo que le dijo Abdullah Ocalan a The Sindhi Internationalist Mazlum al final de su conversación en 1996 todavía es cierta: "Realmente puedo decir que las experiencias de la PKK son una fuente importante de fortaleza para ellos. Si ciertos intelectuales y revolucionarios estudian la ideología y las experiencias del PKK intensivamente, pueden desarrollar una gran fortaleza para sus respectivas personas. Al hacerlo, por supuesto, deben ser pacientes y persistentes ".