El Fastidio
Juan Mt
Si tuviera que escribirle una historia al fastidio, mi personaje principal sería el eterno rival que zumba mientras como. Ese que se apresura desde el patio, desde la huerta, desde el compostero, ese que llega sin invitación y que sondea el perímetro como piloto de guerra. Le escribiría acerca de la envidia porque quisiera ser libre y veloz, romper el viento con apenas unas espinas en las alas y verme tan elegante con mis halterios.
Le diría al eterno rival, mientras mi mano se le apresura, que sus enormes ojos son una maravilla pero que le odio porque no le entiendo, no le conozco y como humano lo mejor que puedo hacer, es buscar su destrucción. No cabemos, estos metros cuadrados son míos, totalmente inaceptable compartir mi espacio con su diminuta existencia.
En mi historia al fastidio le daría un lugar especial, un centro de atención. Algo que obligue a que le veas, a que le examines y que comprendas por qué su inexpugnable presencia no es bienvenida pero siempre es esperada. Ojalá no tuviera que desaparecer nunca y hacer de la brevedad junto a mi eterno rival, más que un fastidio, un motivo más para escribirle.
Xalapa, 2021