¿Cómo progresar en el montañismo?
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El texto siguiente no tiene sugerencias universales como cabría esperar. El artículo ordinal en ruso se refiere principalmente al fenómeno muy especial del montañismo ruso que llamamos "persecución de casillas". La versión español del texto puede resultar interesante no como un conjunto de consejos prácticos para escalar, sino sobre todo como un reflejo de la forma extraña y retorcida que puede adoptar lo habitual bajo la influencia de una ideología poco convincente.
A menudo, las personas que han recibido con nosotros sus primeras impresiones en la montaña y están ansiosas por escalar picos más difíciles, se preguntan: ¿qué hacer a continuación?
Los dos caminos principales por los que (en la realidad rusa) se puede emprender para conocer de cerca los picos de las montañas son el camino conservadoramente formal de nuestros abuelos soviéticos o la versión moderna, más rápida pero más espinosa, de la evolución del montañismo.
La primera opción es la antigua forma soviética, genéticamente cercana a cualquiera que haya nacido de padres soviéticos: un viaje formal a través de las filas y completando las casillas del "Libro del escalador".
La segunda forma, más moderna y no relacionada con la historia de un país en particular, está dictada por las tendencias globales en el desarrollo de la industria de las actividades al aire libre. No tiene el exceso de formalidades que es característico del primer enfoque.
La comercialización total, que no gusta a los seguidores de la "vieja escuela soviética", en la práctica representa una amplia gama de oportunidades para elegir los objetivos de escalada y las formas de alcanzarlos, la disponibilidad de un servicio de alta calidad y apoyo de rescate profesional.
Para seguir este camino, primero sólo tienes que elegir un objetivo: una montaña de ensueño compleja, hermosa y alta. Luego, con el tiempo, de diversas maneras, desarrollará el conjunto de habilidades necesarias para realizar este sueño.
¿Qué tiene de bueno o de malo cada uno de estos dos enfoques?
La primera opción, la "soviética", solía ser buena porque se basaba en una metodología de entrenamiento antigua y probada en el tiempo: completar paso a paso los módulos de entrenamiento y aumentar gradualmente la complejidad de las rutas de escalada.
La principal desventaja del “sistema soviético” en el montañismo es que ya no existe. Además, con este enfoque, es posible que desde el principio tenga una motivación incorrecta, lo cual es inaceptable en el montañismo: el formalismo.
En el sistema soviético de montañismo, una ventaja para escalar era recibir rangos y "papeles", ascender en la escala jerárquica, lo que a su vez proporcionaba una serie de ventajas dentro de la sociedad soviética y los poderosos del sistema VCSPS de la era soviética - (Consejo Central Sindical de Sindicatos).
Hoy en día, este sistema no existe, y lo que queda de él en el montañismo se ha degradado hasta el punto de "perseguir las casillas", cuando una persona se interesa no tanto por el objeto de la escalada, la montaña, sino por la marca formal que recibirá por esta ascensión.
En la realidad rusa moderna, este enfoque se ha convertido en una clara tendencia comercial y encuentra su audiencia entre los clientes conservadores.
En Rusia, algunos antiguos campamentos de montaña con distintos grados de conservación funcionan según el principio de estampar formularios estándar, operando con sellos y marcas, utilizando el antiguo sistema soviético de entrenamiento de montañismo como nada más que una marca comercial.
Sin embargo, repito, el sistema que dio origen a este fenómeno ya no existe. No existe ni la ideología que subyace al montañismo soviético, ni una poderosa escuela de instructores formados con esta ideología, capaces de transmitir toda su experiencia a los principiantes.
De hecho, no queda una experiencia más valiosa: los testigos y participantes restantes de las gloriosas ascensiones de la época soviética ya están en esa edad en la que es mejor compartir recuerdos que experiencias.
Hay dos montañas, muy similares en carácter, altitud, carisma y fama. A pesar de todas las similitudes, ambas montañas tienen una historia de sus relaciones con los humanos completamente diferente. El monte Ushba era un clásico del montañismo soviético.
Todos los logros deportivos más sorprendentes y complejos del montañismo soviético de posguerra en el Cáucaso estuvieron relacionados de una forma u otra con la montaña más famosa del Cáucaso: el Monte Ushba.
Esta montaña era en el activo de todos fuertes escaladores soviéticos y constituía una especie de “prueba de madurez”. A medida que se desarrolló el montañismo deportivo en la URSS, la ruta clásica al monte Ushba fue perdiendo gradualmente su categoría.
Esto se hizo en parte de forma intencionada, ya que el Monte Ushba ocupaba un lugar excepcional en la clasificación soviética de rutas de escalada. La singularidad del Monte Ushba fue que el nombre de la montaña prevaleció sobre su categoría técnica declarada.
La ruta clásica del Monte Ushba de 4ª categoría era inaccesible para los escaladores que formalmente tenían derecho a acceder a las rutas de esta categoría, pero no tenían experiencia en otras ascensiones de 4º grado.
¡De acuerdo con la regla tácita, el Monte Ushba no podía ser el primer “cuarto” en el conjunto de escaladas deportivas!
Usando este ejemplo, puedo decir que ya en la época soviética, el Monte Ushba dividía a la gente según su enfoque sobre la cuestión de la motivación en el montañismo.
Aquellos que necesitaban el Monte Ushba fueron al Monte Ushba. La ruta a esta montaña era bajada deliberadamente en las categorías para "eliminar" a aquellos que no necesitaban la Cumbre, sino simplemente querian "una marca en la casilla".
Los escaladores formales tuvieron la oportunidad de elegir rutas que no requirieran tanta concentración de esfuerzo, riesgo y tiempo como para escalar el Monte Ushba. Muchas rutas de cuarta categoría en la región del Monte Elbrus se pueden escalar en 1 o 2 días sin grandes problemas, riesgos ni esfuerzos excesivos.
De acuerdo, si solo necesita una ruta de cuarta categoría, ¿por qué pasar una semana escalando el Monte Ushba, con un resultado impredecible: el Monte Ushba puede simplemente "negarle el acceso"?
Uno podría pasar cómodamente un día de campamento en campamento hasta la torre de roca del pico MNR (República de Mongolia) y obtener la nota deseada en la columna “4a” de su "Libro de escalador".
Hoy en día, el acceso a las rutas del monte Ushba sólo es posible desde el sur, del lado georgiano. Desde el lado norte (que es ruso), especialmente desde el desfiladero de Shkheldinsky, las autoridades rusas introdujeron una prohibición total de escalar todas las cumbres montañosas del Cáucaso principal, incluido el Monte Ushba.
Mi segundo ejemplo será el Matterhorn, el pico legendario en la frontera entre Suiza e Italia, la cuna europea del montañismo técnico.
A pesar de que el Matterhorn conservó su estatus de “montaña inexpugnable” durante más tiempo que cualquier otro pico alpino, a partir de finales del siglo XIX comenzó a ganar popularidad como ruta de escalada comercial del más alto nivel de dificultad.
Las dos primeras ascensiones al Matterhorn dejaron la huella más sorprendente en la historia del montañismo moderno. Las ascensiones de Carrel desde Italia y de Whymper desde Suiza fueron un asombroso ejemplo de determinación y fortaleza.
Estas difíciles primeras ascensiones de las dos rutas más populares al Matterhorn en la actualidad se completaron en condiciones de falta de equipamiento total, sin infraestructura, sin comunicaciones y servicios de seguridad.
Ahora, al escalar el Matterhorn a lo largo de una ruta equipada con refugios, cuerdas fijas y escaleras estacionarias, utilizando todos los "beneficios de la civilización" (ropa moderna, equipo de alta calidad), es difícil incluso imaginar las pruebas que sufrieron los pioneros.
A pesar de la ubicación límite y la gran dificultad de las rutas de escalada del Matterhorn, nunca en la historia se ha intentado limitar de ninguna manera el acceso a esta montaña.
La escalada al Matterhorn nunca se ha formalizado mediante la emisión de ningún certificado ni referencia especial. Tampoco a nadie se le otorgó ningún rango oficial para escalar el Matterhorn; el montañismo alpino no se vio afectado de ninguna manera por esto.
Aunque la frontera entre Italia y Suiza pasa justo a lo largo de la cumbre, a nadie se le ha ocurrido nunca la idea de expedir pases fronterizos para el Matterhorn; en una sociedad civilizada, una patología de este tipo va más allá de los límites del absurdo posible.
Cualquiera siempre puede desafiar la montaña; este es el derecho normal de cualquier persona normal; el control en este caso debe ejercerse únicamente con el sentido común.
Es significativo que, en términos de garantizar la seguridad, dicho mecanismo de control resultó ser más eficaz que el "método formal" ruso.
El número de accidentes en la región de Cervinia (It) / Zermatt (Ch), muy popular entre los escaladores, donde se encuentran numerosos picos icónicos y rutas de senderismo, es significativamente menor que la tasa de accidentes en zonas "reguladas" por el antiguo sistema burocrático ruso (soviético).
La escalada al Matterhorn no se puede clasificar según el sistema de clasificación ruso. Dos rutas clásicas, desde Italia (Leona) y Suiza (Hörnli), están equipadas de acuerdo con los estándares de seguridad del montañismo profesional.
Muchos largos difíciles resultaron mucho más fáciles gracias a la presencia de refugios fijos, estaciones de reunión, escaleras y cuerdas fijas.
El tema de este artículo provocó una tormenta de indignación entre los instructores de la antigua escuela soviética, así como entre los fanáticos de las insignias y las marcas de verificación.
La única objeción clara fue que el comercio en la montaña vulgariza la “idea del montañismo”. Sin embargo, nadie pudo explicar la esencia de esta idea. Cualquiera que sea esta esencia, surge una contrapregunta: ¿la formalización y la burocracia no vulgarizan nada?
Dos de mis ejemplos hablan elocuentemente: centros turísticos de montaña desarrollados, eficientes y seguros en los Alpes, cubiertos por una red de cómodos refugios, con servicios de rescate modernos y eficaces y amplias oportunidades para todo tipo de recreación en la montaña. Y lo más importante: la tasa de accidentes más baja del mundo.
En contraste: viejos campamentos alpinos soviéticos casi colapsados, estúpidas prohibiciones de escalada, servicios de rescate deficientes y no cualificados trabajando en las rutas turísticas para ganar un poco dinero.
Sin embargo, en muchos aspectos además del montañismo: en Rusia tenemos una peculiaridad nacional extraña: nos encanta estar orgullosos de los logros de nuestros antepasados en el contexto de las ruinas en las que hemos convertido esos logros.
Pero del hecho de que hace 50 años nuestros antepasados realizaron ascensos alpinos que despertaron un alpto respeto entre los escaladores más fuertes del Occidente, heredamos el hábito de "perseguir a las casillas" y odiar a quienes que piensan de manera diferente.
Autor de la historia y fotografías - Alex Trubachev
Su guía profesional de montaña internacional y entrenador de escalada
EDICIÓN MCS 2024