150 videojuegos a los que tienes que jugar al menos una vez en la vida
117. Ico
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Ico
Fecha de creación: 2001
Desarrollador: Team ICO
Distribuidor: Sony
Género: Videojuego artístico
Plataforma: PlayStation 2
Ico sería un niño normal y corriente si no fuera por un pequeño detalle: desde el momento de su nacimiento dos pequeños cuernos asomaban desafiantes, uno a cada lado de su cabeza, una señal indudable de desgracia y malos augurios para los habitantes de la aldea donde nació. Cuando llegó la edad estipulada ni siquiera sus padres sintieron lástima por él y, al rayar el alba del día de su duodécimo cumpleaños, Ico tuvo que hacer frente a su destino. Los jinetes encapuchados le llevaron al enorme castillo donde únicamente el aullar del viento le hizo sentir que aquello no era una pesadilla, y le dejaron allí encerrado, en el interior de la solitaria fortaleza, oculto dentro de un féretro de piedra de donde nunca podría escapar.
Ico estaba solo y a oscuras cuando el suelo comenzó a temblar y el féretro cayó, perdiendo el conocimiento. Cuando despertó comprobó que había logrado salir del ataúd…, pero ahora debía hallar la salida del castillo. En su huida, Ico encontró una estancia con una jaula en cuyo interior estaba encerrada una niña vestida de blanco, una princesa llamada Yorda que hablaba un extraño idioma que era incapaz de entender. Ico no pudo evitar ayudarla a escapar, dando con ello comienzo su amistad… y nuestra aventura.
Ico es ágil, puede trepar, saltar y subir cadenas, además de poder empuñar palos y espadas para protegerse de las sombras que intentan atrapar a Yorda, pues sin ella no podrá abrir las puertas, que únicamente responden ante el poder de su luz, ni grabar la partida. En cambio, Yorda es menos ágil y necesitará la ayuda de Ico para poder sortear algunos obstáculos, por lo que ambos avanzarán de la mano por el enorme castillo resolviendo puzles y dependiendo el uno del otro.
El desarrollo de Ico duró cuatro años. El director del proyecto fue Fumito Ueda, y el resto del equipo estaba formado por dos programadores, un diseñador y cuatro artistas, lo que da una pequeña idea del nivel creativo y artístico del proyecto. Juntos llevaron al límite el concepto de «diseño sustractivo», que se basa en eliminar cualquier elemento gráfico de la pantalla que pudiera distraer la atención del jugador.
Como se puede comprender, Ico no es un videojuego al uso, no es un título repleto de acción o aventuras, sino más bien un videojuego de sensaciones que evoca un mundo imaginario repleto de belleza y soledad, la historia de dos niños unidos por un destino que no alcanzan a entender. Gracias a los efectos de luz se consiguió crear una atmósfera etérea, mágica, que hace que al contemplar nuestro monitor nos encontremos inmersos en un hermoso cuento de hadas. Los protagonistas son un claro ejemplo de sencillez, con movimientos suaves y fluidos, y desprenden cierta sensación de tristeza, de miedo y de indefensión. Solo podremos disfrutar de la música en momentos puntuales de la aventura, momentos en los que nos recrearemos con unas melodías tranquilas y llenas de sensibilidad de una calidad increíble. Ico nunca llegó a ser un éxito de ventas, pero el paso del tiempo le ha situado en el lugar que se merece y es unánimemente considerado como una auténtica obra de arte.