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44. Super Mario Bros. 3
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Super Mario Bros. 3
Fecha de creación: 1988
Desarrollador: Nintendo
Distribuidor: Nintendo
Género: Disfraces multiusos
Plataforma: NES
Super Mario Bros. 3 es uno de los pesos pesados de la industria, uno de esos títulos que aparecen en todas y cada una de las listas que intentan recopilar los mejores videojuegos, una de esas aventuras que no dejan indiferentes a quienes hayan tenido la suerte de disfrutarla. Es considerado casi unánimemente como el mejor cartucho de NES, y hay quien opina que es el mejor Super Mario en dos dimensiones jamás creado… con permiso de Super Mario World, claro está.
Miyamoto fue de nuevo el encargado de llevar a cabo este proyecto, con Takashi Tezuka en la dirección. Lo primero que hay que destacar del nuevo juego es el regreso a los orígenes del primer Super Mario Bros., sobre todo tras el extraño y no demasiado exitoso cambio de rumbo que supuso la versión norteamericana y europea de Super Mario Bros. 2, que no hay que confundir con la versión japonesa, que en Europa y Norteamérica llegó años más tarde con el nombre de The Lost Levels, y únicamente para la videoconsola SNES.
La historia de Super Mario Bros. 3, como viene siendo habitual en los títulos de Super Mario, no es más que una mera excusa para poder disfrutar de la aventura: Mario y Luigi deben salvar a los siete reyes de los siete reinos que forman el Reino Champiñón. La principal novedad en el desarrollo de Super Mario Bros. 3 es la aparición de un mapa con el cual podemos desplazarnos entre fases y en el que encontramos diferentes caminos o bifurcaciones, rompiendo por tanto con la linealidad existente en los anteriores capítulos de la saga. En este mapa podremos también utilizar diferentes objetos que conseguiremos en el interior de las fases, como, por ejemplo, nubes que nos permitirán saltarnos niveles sin tener que superarlos, martillos que nos permitirán abrir caminos cerrados o las famosas flautas con las que podremos llegar a las clásicas zonas secretas, desde las que podremos acceder a otros mundos.
Pero también hay cambios en el interior de las fases. Para empezar, el desplazamiento ya no es unidireccional, sino que se puede volver hacia atrás en los niveles para recoger o buscar objetos, lo que permite una mayor libertad en el juego. Aparte de los ya clásicos superpoderes de Mario cuando este consigue la seta, la estrella y la flor de fuego, hacen su aparición un gran número de objetos nuevos, entre los que destacan los disfraces disponibles en algunos niveles: el de rana, que será muy útil en las zonas acuáticas, el de mapache y el de tanuki, que nos permitirán volar, o de Hammer Bros., con el que podremos lanzar martillos.
El apartado técnico es uno de los mejores y más cuidados en todos los aspectos que se pueden encontrar en la NES. Visualmente es casi insuperable, y la música vuelve a estar a cargo de Koji Kondo, un sinónimo de calidad y melodías inolvidables. El Libro Guinness de los récords de 2008 consideraba a Super Mario Bros. 3 el videojuego más vendido de la historia —sin tener en cuenta los que se han lanzado en pack junto con alguna consola—, con más de 17 millones de copias.