¡¡Torpedo!!

¡¡Torpedo!!


Capítulo VI

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CAPÍTULO VI

—Setecientas mil toneladas son muchas toneladas.

—Nada es imposible, si uno se propone lograrlo.

—¡Bien dicho, comandante! Cuente conmigo, si no puede contar con el teniente Waser.

El así aludido amagó un puñetazo a la cara del contramaestre y después los tres rieron y bebieron largos tragos de humeante café.

A comienzos de 1943, ya los nuevos submarinos alemanes pertenecían al tipo VII F que, además de poder almacenar muchos más torpedos y fuel-oil que los anteriores, también ofrecía sobre aquéllos la gran ventaja del schnorchel.

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