she.

Hola, cachetona.

Qué extraño, ¿no?

Digo, te imagino con el ceño fruncido, extrañada o curiosa de saber a qué se debe que yo, Jerome Kai Vandeer, esté usando una página externa para escribirte una carta.

Pero, lo siguiente son letras del corazón. Te hablaré con toda la sinceridad que hay dentro de mí, porque a veces siento que no me puedo expresar como quiero. Así que, voy a dividírtelo en secciones. Me dijeron que debo aprender a ser un poco más organizado, así que, empecemos con el pie derecho.

En caso de que quieras que te recuerde lo que me gusta de ti:

+ Todo.

Sabes que físicamente me pareces preciosa, de eso no hay duda, pero tu corazón... Ah, Sunnie, es que ese corazón que tienes me hace sentir cada vez más enamorado. Jamás había conocido a alguien tan dulce, y ya sé que sí te lo he llegado a decir, solo que me gusta recordártelo. Y también recordármelo a mí. Porque fue por esa sincera sonrisa que provoca unos lindos ojos achicados que caí ante ti.

En caso de que dudes de mis sentimientos por ti:

Soy MUY malo para demostrar cariño por mucho tiempo. Aún no estoy seguro si es porque me empalago conmigo mismo, o porque una parte de mí se sigue cerrando (no como antes, aclaro), pero quisiera decirte que eres mi bebé preciosa. Mi jaina, si quieres que te hable como mi alter ego cholo.

Hablo de ti la mayor parte del tiempo. Te menciono con todos mis amigos. No puedo hablar de mí sin mencionarte a ti. No puedo contar algo y no decir "Sunnie suele hacer esto", "a Sunnie también le gusta aquello." Porque estás en mi cabeza diariamente, e incluso cuando mi día está ajetreado, solo pienso en los segundos que faltan para verte.

En caso de que no tengas un buen día:

Colocando el celular a la altura de su rostro, volvió a dudar si hacerlo o no. De todas formas, estaba solo en la sala de maestros, y no tenía una dignidad firme cuando se trataba de intentar hacer sonreír a su novia a la distancia. Aplastándole al botón con el pulgar, intentó mostrar un semblante un poco más animado.

— Me gustas mucho, ¿qué debo hacer? —Movió los hombros.— Eres tan bonita, ¿qué debo hacer? —Hizo un gesto con sus manos.— Me gustaría verte reír una vez. ¿Qué piensas de eso? —El celular por poco se le cayó y se vio obligado a retomar su papel.— En verdad lo digo, ríete.

Sacudiendo el corazón con sus dedos hacia la cámara, finalizó el video.

Era la primera vez que hacía aegyo. ¿Bellamy le había mentido al recomendarle esa canción y esa opción para hacerla feliz? Esperaba que no.

...

Y si lo de arriba no funciona para animarte, sabes que puedes desahogarte conmigo. Te ofreceré abrazos, te escucharé, te llenaré de besos y te compraré lo que quieras en la tienda de conveniencia que está a una cuadra de casa. Solo debes decir: "Jero, ¿cupón vigorizante?", y sabré a lo que te refieres.

En caso de que quieras una conclusión:

Te amo, yo soy tu pendejo.

Nunca me mangoneas porque siempre respetas mi espacio, pero si un día vienes a decirme que haga algo, créeme que tengo el mandil puesto por ti.

Felices dos meses (que en teoría son ocho), Nari.

Gracias por ser lo único que me hace feliz cuando siento que se me viene todo abajo.

En caso de que pienses que nunca te he dedicado bien una canción: