Secret
Capítulo 23
Página 27 de 104
Capítulo 23
─ ¡Vamos! Nunca te he visto en bikini ─ Des me suplicó.
─ Y no me veras ─ la ignore metiendo unos jeans a la maleta que me llevaría.
Des llevaba prácticamente toda la mañana suplicándome usar bikini y llevo toda la mañana diciéndole que no. Odiaba usar bikini era como mi plaga, si, no me gusta mi cuerpo, soy flaca pero no me siento apta para usar ese tipo de trajes; lo único que ocupo para nadar es un taje de baño que me cubra toda la espalda y abdomen.
─ Harry te reto, no debes dejar que te gane ─ me dio un ligero codazo en el brazo.
─ No me interesa lo que él diga ─ gruñí ─. Aparte no sé nadar ─ baje el tono de voz.
─ ¿Acaso vas a dejar que te intimide? ─ iba a poner otra prenda en la maleta pero me pare en seco.
Harry pensaba que era una niña de mami quien se sentía insegura de sí misma (lo cual es cierto) pero tal vez le tenga que mostrar otra perspectiva, tal vez tenía que comportarme imponente ante él.
─ Solo tenemos dos horas para ir al centro comercial y buscar un bikini ─ termine de poner la última prenda ─. Más vale que combine con mi tono de ojos ─ le advertí.
─ Estas con la indicada ─ mi amiga sonrió de oreja a oreja.
Martha nos dio dos horas para ir comprar el bikini y regresar al campamento a la una en punto. Llevamos a Den con nosotras ya que pensamos que era una buena oportunidad para conocernos mejor. Des parecía niña brincando por todo el centro comercial en busca de una tienda de bikinis, realmente no pensaba que aquí, Londres fue a haber muchas porque…bueno, aquí apenas y llegan los rayos del sol.
─ ¿Es necesario comprarlo? ─alce un poco la vista para ver directamente a los ojos color agua de Des ─. No creo que haya albercas ahí o que nos metamos al mar.
Nos jalo de la mano a Den y a mi hacia la tienda.
─ Cierra la boca y deja de poner excusas, Allyson ─ rodé los ojos por la forma en la que me llamo ─. Supongo que hay albercas techadas.
Den empezó a correr por toda la tienda buscando un buen bikini para mí, y bueno que decir de Des, ella parecía niña corriendo por duces. Empecé a buscar bikinis que no fueran tan reveladores pero entonces se me ocurrió una idea, ¿por qué no ir con traje de baño completo que me deje ver un poco de más carne?
Me dirigí hacia una de las empeladas.
─ ¿Dónde hay trajes de baño de cuerpo completo? ─ pregunté ansiosa.
─ ¿Cuerpo competo? ─ frunció su ceño ligeramente ─. Hoy en día las muchachas como tú no usan trajes de baño de cuerpo completo, ¿qué clase de chica eres, huh?
Solté una pequeña risita.
─ Una un poco…diferente ─ sonreí ─. Bueno, ¿dónde están?
Me pidió que la siguiera y eso hice. De toda la enorme tienda solo había una pared con solo tres diseños diferentes de trajes de baño completos y la mayoría mostraban más carne de lo que yo esperaba.
Me quede visualizando uno por uno con delicadeza optando cual era el menos revelador y entonces por fin elegí uno color amarillo un poco brillante, para mi opinión. Tenía un par de franjas negras en el costado y por detrás estaba todo descubierto y un poco de la cintura, de todos los demás era el que cubría más cuerpo.
Lo tomé entusiasmada para enseñárselo a mi amiga pero ella de inmediato me paro y me quito el traje de baño que llevaba y me coloco un bikini en la mano. Para ser sincera un bikini muy sexy y lindo, constaba en un bikini color azul verdoso (del mismo color de mi ojos) en la parte de arriba los bordes estaban pintados de negro y en la copa cruzaban otras dos líneas negras. En la parte baja lo único que lograba cubrir mi parte íntima era un pedazo de tela azul-verde mientras que por las caderas solo eran un par de listones que lo sostenían, lo que agradecía de este bikini era que cubría la mayoría del trasero.
─ ¿Y bien? ─ mi amiga me sonrió pícara.
─ No ─ se lo estiré ─. Es muy…está muy…
─ ¿Sexy?
─ Pervertido ─ la corrijo de inmediato.
Ella ignoro mi comentario.
─ Sé que gusta ─ Den apareció a lado de Des.
─ A mí me gusta ─ Den sonríe cuando ve bikini en mis manos.
─ Pero a mí…─ mi amiga me interrumpe.
─ Calla y vete a probar eso ─ me empuja hacia el probador ─. Si no te lo pruebas te mando desnuda.
Fruncí el ceño disgustada.
─ Ponerme eso será como estar desnuda.
─ ¡Ay! Ally, es un bikini común y corriente ─ Des rodó los ojos hasta el cielo ─. Aparte combina con tus ojos, justo como lo pediste.
Cuando Des se proponía algo realmente lo hacía. Des empezó a jugar con el traje en su cuerpo, empezaba a mover lo de un lado a otro y reía.
─ Sé que te gusta ─ se mordió el labio y continuó jugueteando con él.
Rodé los ojos y la arrebate el bikini.
─ Dame eso ─ me gire con dirección a los probadores.
Aunque no la estuviera viendo sabía que sonreía triunfadora. Entre al pequeño probador y empecé a quitarme las prendas superiores, no entendía la razón por la usar bikini o traje de baño, quiero decir estamos en Inglaterra el lugar donde nunca para de llover. ¿Para qué llevarlo? No me servirá de nada.
Antes de darme cuenta ya tenía el bikini puesto, mis movimientos fueron lentos cuando abrí la puerta del probador. Des quien tenía la vista clavada en Den bajo la mirada hacia a mí y me sonrió sorprendida, la pequeña niña rubia reacciono como Des.
─ ¡Wow! Te ves más candente de lo que pensé ─ Des se acercó hacia a mí y me puso su mano en mi estomagó desnudo ─. Jamás te había visto así y eso que te conozco desde hace años ─ volvió a sonreír sorprendida ─. Eres más flaca de lo que suponía, tienes buena figura, hermana ¿has ida al gimnasio?
Ladee con la cabeza y asentí.
─ Algunas veces ─ me encogí de hombros.
Subió sus manos a mis hombros y me giró hacia el espejo completo. Me quede petrificada, jamás me había visto semidesnuda frente a un espejo, tenía mejor cuerpo de lo esperado.
Des sonrió detrás de mí.
─ ¿Jamás te habías visto en un espejo así?
─ No, nunca ─ me tomé la pansa.
Mi cuerpo tomó un color de piel se puso un rosa claro, mis ojos no se veían azul con verde sino tenían un color muy parecido al de Harry.
─ Pensé que todas la mujeres modelaban en el espejo ─ la mejillas de Des se pusieron rojas cuando yo negué con la cabeza ─. Me siento un poco avergonzada.
─ Tal vez no seas la única ─ le sonreí.
Negó con la cabeza.
─ Cámbiate, iré a pagar. Después iré a buscar a personas que modelen frente al espejo en ropa interior ─ salió disparada hacia la registradora.
Después de salir de la tienda, Des había hecho lo prometido. Fue preguntando a cualquier mujer que se le cruzara sí ellas modelaban frente el espejo semidesnudas; la mayoría lo negó pero otras (aproximadamente seis de unas treinta que pregunto) dijeron que si.
Cuando llegamos del campamento solo faltábamos nosotras para subir a las camionetas que nos llevarían a nuestro destino. Agarremos nuestras maletas y subimos a la camioneta, Harry, Derek y Victoria iban con nosotras, Des no tarado en hacer plática con Derek después de eso no despegaron en todo el camino. Harry y Victoria platicaron durante un rato hasta que ella se quedó dormida.
Gire mi cabeza hacia la ventana cuando sentí el calor de una persona a mi lado, voltee pensando en Destiny pero no fue así. Harry tenía su mirada clavada en la pulsera roja que mi madre me dio hace tiempo.
─ ¿Tiene algún significado? ─ tomó mi muñeca. No supe porque no le quité mi muñeca y le grite que se alejara pero tenía que admitir sentir las manos de Harry era como sentir la piel de un bebe, eran suaves y grandes.
─ No ─ era verdad ─, pero me trae buenos recuerdos ─ pase mi mano por la pulsera y nuestras yemas de los dedos se rozaron. Las quite de inmediato y al parecer Harry lo notó porque apretó su mano contra mi muslo.
No me moví mientras él sonreía. Tomé una bocanada de aire lista para hablar pero Harry me detuvo.
─ Según yo las mejores escuelas de diseño son en Nueva York, ¿por qué no fuiste ahí? ─ sonó curioso. Para mí era extraño que aquel hombre me estuviera preguntando sobre cosas que no le interesaban.
─ Amo San Francisco, no quiero irme de ahí ─ el arqueo las cejas un poco sorprendido.
─ ¿Hablas en serio? ─ seguía sorprendido ─. Sé que eres una chica aburrida pero tenía un poco de esperanzas en que fueras aventurera ─ apreté la mandíbula ─. ¿Al menos te gustan los juegos extremos?
─ No ─ afirme con seguridad.
Esta vez no pareció estar tan sorprendido.
─ Creo que no te podré llevar a practicar Bungee Jumping ─ dijo en tono apenado.
─ Será una lástima ─ mencione irónica.
─ Lo lamento mucho, conejita.