Secret
Capítulo 56
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Capítulo 56
Había un gran peso a lado mío. Fruncí el ceño con aun los ojos cerrados, cuando los abrí aun alumbraban los pequeños faroles en el cielo. Mire a lado izquierdo cuando me encontré con la espalda de un hombre.
Di un brinco exaltada, empecé a dar jadeos leves. Me acerque y me asome para de su rostro.
Su respiración era lenta Harry tenía los labios fruncidos. Me relaje al saber que él era en que estaba y no el chico de hace unas cuantas horas.
Su rostro era frustrado y tenso, probablemente tienda una pesadilla. Abrace su torso y le di un beso en la mejilla; reaccionó al momento, tomo mi brazo y lo enredo más a él; dio la vuelta para enseñarme su rostro.
《Aún seguían esas preguntas por mi cabeza ¿Realmente esteera el Harry de simple? ¿Está realmente era su vida? Pero lo que más me atraía era su pasado, ¿por qué hay tantas personas que lo odian? Llegare al fono de esto.》
Me quede dormida con aun con esas preguntas arrumbando mi mente.
~ ~ ~
Cuando abrí los ojos solo estaba mi mano a lado mío, él se había ido de la cama.
─ ¿Harry? ─ mi voz sonaba ronca. Restregué mi cara con ambas manos mientras trataba de buscarlo por la habitación.
Voltee mi cabeza hacia el reloj que se encontraba el buró, marcaban las once de la mañana.
Me pare de la ama con cuidando apoyándome en la pared. Baje las escaleras hacia la cocina.
─ ¿Harry? ─ volví a preguntar pero nadie contesto. Asome la cabeza a la sala, al cuarto de lavado, el baño y no había nadie.
Un zumbido sonó en la mesa, me dirigí hacia este donde se encontraba mi celular. Lo tome y mire un mensaje de Harry diciendo.
"Regreso a casa en una hora."
Odio cuando hace esto, me deja sola en un lugar que ni siquiera conozco bien y encerrada en casa sin hacer nada.
Saque la esa de la mesa de la cocina y me senté en esta para recargar mi codos en la mesa. Volvieron a llegar las preguntas. ¿Qué era de él? ¿Por qué salía tanto de casa? ¿Lo que decía el chico de ayer era verdadero? ¿Harry era un patán? Realmente no entendía nada.
Escuche la puerta principal azotarse. Fruncí el ceño, me levante de la silla con cuidado para no afectar mi pie tomando una de las palas de madera. Me dirigí hacia la puerta con ayuda de la pared y después hablé.
─ ¿Harry? ¿Llegaste? ─ nadie me contesto.
Si media vuelta cuando me encontré con un hombre. Pegue un grito exaltada, él se volteó e hizo lo mismo. Tome la pala para pegarle en la cabeza pero él lo detuvo con su mano.
─ ¿Louis? ─ pregunte con un jadeo.
El pestañeo un par de veces acercándose a mi rostro.
─ ¿Ally? ¿Qué estás haciendo aquí?
─ Aquí vivo por ahora ¿tú qué haces aquí?
─ Espera ¿vives con Harry? ─ quito la pala de mi mano.
─ ¿Cómo sabes que él vive aquí?
─ El me lo dijo.
─ ¿Qué? Pensé que no se conocían.
─ Cuando te emborrachaste él y yo estuvimos en contacto pero nunca me dijo que vivías con él.
─ ¿Me emborrache? ¡Ustedes lo hicieron! Me dieron a beber cerveza.
─ Vodka ─ me corrigió.
─ Lo que sea. No soy experta en bebidas alcohólicas ─ di un paso hacia atrás recargándome en la pared.
Dio una carcajada.
─ ¿Tuviste una noche candente con Harry y te lastimo?
─ ¡No! ─ grite mientras el daba otra carcajada ─ ¿Por qué dices eso? ¿Es por qué estoy lastimada del tobillo?
─ No, mujer ─ rodeo los ojos ─. Aquí ─ bajo la manga de mi pijama mostrándome un moretón que tenía entre el cuello y el hombro.
─ No lo había visto ─ murmure.
─ ¿Entonces sí lo hicieron? ─ dijo con aun su mano en mi hombro.
─ ¡Ya te dije que no! ─ le di un manotazo en la mano.
─ ¡Ouch! ─ gritó ─. ¿Por qué hiciste eso? ─ miró su mano.
No le conteste y me di la vuelta para dirigirme a la cocina donde estaba sentada. Saque la silla y me senté en ella. Él se sentó en frente de mí poniendo sus manos en la mesa.
─ ¿Cómo te paso eso? ─ señaló mi tobillo desde la mesa ya que esta era de cristal.
─ Me caí ─ dije seca. Se acomodó en la silla sin despegar la mirada.
─ ¿Te caíste? ─ dio una carcajada ─. Ay, Ally solo tú.
─ Todo el mundo se cae, no es nada de otro mundo.
Empujo la sillas hacia atrás haciéndola soñar contra el piso.
─ ¿Harry tendrá algo de beber?
Se paró de la silla caminando hacia el refrigerador. Trate de pararme lo más rápido de la silla para parar a Louis.
─ No hay nada que tomar ─ me puse enfrente obstruyendo el refrigerador.
─ Preces mi mamá ─ bufó. Me tomó de la cintura y me cargo poniéndome hacia atrás de él.
─ ¡Oye!
Hizo una mueca. Se volvió a refrigerador y lo abrió.
─ Veamos ─ se agacho buscando entre la despensa ─. Genial ─ tomó una botella y la mostró en mi cara. ─ La beberé.
La agitó un par de veces; me cruce de brazos.
─ Eres más odioso que Harry.
La puerta de azotó y ambos abultamos hacia esta.
─ Lo sien…─ Harry se quedó callado al mirar a Louis a lado mío. Chocó su mano en su cara.
─ Hermano ─ Louis elevó la botella.
─ Hola, Louis ─ dejó las lleves en la mesa y se acercó con nosotros.
Louis se acercó a él y yo fui tras él.
─ ¿Por qué no me dijiste que ella estaba aquí?
Me señaló con sus ojos.
─ Por si no te habías dado cuanta estoy aquí ─ dije.
Me ignoró y continuo hablado con Harry, acomode mi blusa y los seguí mirando y escuchando.
─ No es necesario ─ Harry se encogió de hombros y se acercó a mí.
Paso una mirada fría y continua su recorrido hasta la cocina. Mi vellos se pusieron de gallina, trague saliva y le hecho una mirada. Mire a Harry fijamente y me di cuanta algo diferente en él. En su oído izquierdo llevaba aun arete colgado en la oreja en forma de cruz. Después mire su brazo y tenía un nuevo tatuaje; no alcanzaba a verlo ya que eran letras diminutas, al parecer era una alguna fecha.
─ Me gusta tu pricing ─ Louis señaló con la botella su oreja.
Él tocó su oído y sonrío.
─ Gracias ─ abrió el refrigerador y saco una cerveza.
─ Salud.
Extendió la botella y Louis hizo loísmo a lo lejos.
─ ¿Quieres? ─ Louis me ofreció. Antes de que negara hablo ─. Oh cierto, que eres niña bien.
─ Si. Odio el alcohol ─ di la vuelta y camine despacio hasta llegar y sentarme en la silla.
Ambos se sentaron enfrente de mí. Saque mi celular y le mande un mensaje a Harry.
"¿¡Por qué Louis está aquí!?"
Su celular sonó a lo enfrente. Lo saco y después me miro confundido.
"¿Y por qué no?"
Gruñí y empecé a teclear. "¡Estoy hablando enserio!"
Subí la mirada y me regalo una sonrisa. Puse la mirada en mi teléfono y mire su mensaje.
"Yo también"
Iba a volver a escribir pero Louis hablo.
─ ¡Quieren dejar de mandarse mensajes! Estoy aquí, por si se habían olvidado de eso. Si quieren decirse cosas morbosas puedo conseguirles un motel cinco estrellas para que se lo digan cara a cara y lo hagan pero estoy aquí ¡Por favor, chicos! No vamos en secundaria donde la hormona se alborota. Madre de dios, ayúdalos.
Me moví incómodamente, mire a Harry que tenía su mano cubierto su boca para no mostrar su sonrisa.
─ ¿Puedes explicarme que está haciendo Louis aquí? ─ mire fulminante a ambos.
─ Necesito que me dé un opinión ─ contestó.
─ ¿Opinión de qué? ─ mire a ambos.
─ Esto no le gustara ─ dijo burlón Louis.