Secret

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Capítulo 58

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Capítulo 58

 

Nunca había visto a alguien con tanto aparatos conectados al cuerpo, tantos cables conectados a la venas. No podía distinguir si eran de suero o plaquetas de sangre. Simplemente estaba impresionada.

Soltó mi mano y corrió hacia su mandare.

─ Llegue. Estoy aquí ─ me acerque hacia ellos y admire a la señora Moore. Su piel blanca pálida, sus labios descuartizados y morados. Observe su cabeza y no tenía ni un pelo, eso quería decir que sufría de Cáncer.

Tomó las manos de su madre y las besó

─Harry ─ sonó la voz de la señora ─, llegaste ─ su voz era aguda y terriblemente débil.

─ Iba a llegar pasara lo que pasara.

Ella alzó su cabeza y me miro. Le sonreí y ella a mí.

─ ¿Quién es ella? ─ miró a Harry y después a mí.

─ Ally Stalls o bueno Allyson, pero me gusta que me llamen Ally. Usted puede llamarme como quiera ─ sonreí. Harry arqueó una ceja con una sonrisa burlona.

─ Stalls ─ susurró la señora sin mirar a otro lado más que a mí ─ Interesante apellido, pero lindo nombre, Ally. Ven ─ palmeo la camilla con su mano.

Camine lentamente hasta quedar en donde me había señalado. Mire sus ojos negros.

─ Creo que por fin Harry se encontró a alguien linda y buena ─ me miró sonriendo. Paso su mano fría por mi mejilla cuando dejó caer una lagrima.

Trague saliva y evite dejar caer las lágrimas.

 

~ ~ ~

 

Ya han pasado dos días enteros y al parecer la señora había dado un gran avece. Le habían desconectado uno de los cables, no sabía cuál. Ella me contó que hace nueve meses le diagnosticaron Cáncer de hígado, estuvo en por vario tiempo con terapias pero no funcionaron. También me contó que cuando a Harry le llego la solicitud del campamento de inmediato acepto ya que quería el dinero para todos los medicamentos para ella.

Harry había salido un par de horas para ir a casa a ducharse, cambiarse etc. La señora Moore dormirá mientras le cambiaban el suero. La enfermera termino y puso una jeringa a en una de las charolas.

─ He terminado, si ocurre algo toque el botón rojo de aquí ─ señalo la enfermera un botón que se encontraba a lado de la cama ─. ¿Entendido?

─ Si, gracias.

Ella acomodo el carrito donde se encontraban todos los medicamentos y salió. Tome mi libro y me puse a leer. Mis ojos estaban exhaustos, Harry y yo habíamos permanecido aquí dos días y casi no hemos dormido, en especial el. Leí apenas dos renglones y quede dormida.

Abrí rápidamente los ojos ya que había escuchado un gemido que venía de la señora Moore, ella se retorcía en la cama. Corrí hacia ella y le tomo los brazos.

─ Señora Moore, tranquilícese ─ el pulso de mi corazón empezaba a acelerar.

Apreté el botón tres veces seguidas y empecé a gritar "¡Enfermera! ¡Enfermera!" Pero nadie llegaba. Marque al número de Harry y en cinco pitidos contesto.

─ ¿Todo anda bien? ─ sonaba su voz cansada.

─ ¡No! ¡Ven ¡Ahora! ─ grite desesperada.

─ ¿Qué ocurre? ─ gritó igual que yo o tal vez más.

─ ¡VEN! ¡AHORA! ─ grite más desesperada que ese rato.

─ ¡A…─ colgué.

Apreté las manos de la señora tratando de calmarla, pero se seguía retorciendo cada vez más.

─ Ally ─ dijo adolorida.

─ No, no hable.

Pusó sus manos encima de la mía y la apretó.

─ Por favor no dejes que se vuelva loco ─ empuñó los ojos ─Ally, cuídalo por favor, cámbialo ─ jadeo ─No dejes te atrape John.

Dio una gritó. Me quede paralizada al escuchar el nombre de mi padre.

─ ¿Qué? ─ parpadee y reaccione. No era tiempo de pensar en mí. Quite su mano la de la mía y apreté el botón más veces ─- Llamare las enfermeras ─ corro hacia la puerta y la abrí. Asome mi cabeza ─. ¡ENFERMERA! ¡DOCTOR! ¡QUIEN SEA! ¡POR FAVOR! ─ empezaron a brotar las lágrimas.

Imagine a mi madre ahí acostada sacudiendo se porque sentía dolor y lo peor es que tal vez sea la última vez que la fuera a ver. Llegaron los directores y empezaron a tomar le el pulso, darle tranquilizantes. Una de las enfermeras me empujo y me ordeno que saliera.

No sé si iba a vivir pero tenía esperanzas de que viviera.

 

~ ~ ~

 

Habíamos esperado tres dos horas en la sala de espera esperando a que algún doctor llegara.

─ ¿Le contaste sobre John? ─ mire a Harry.

─ No, ¿por qué preguntas?

─ Solo quería saber.

《¿Cómo sabía su madre sobre John? ¿Acaso soy la única Stalls en el mundo? ¿La noticia de que me quiero vender llego a todas partes del mundo?¿Lo conoció?》

Uno de los doctores se acercó y ambos nos paramos de nuestros asientos.

─ ¿Señor Moore?

─ ¿Si? ─ Harry se puso de inmediato en frente del doctor.

─ Hicimos lo que pudimos ─ Harry abrió la boca y sus ojos se llenaron de lágrimas. El doctor lamió sus labios y se quitó su gorro azul ─. Murió a las 16:58.

El doctor de retiro dejándonos solos.

─ ¡Maldita sea! ─ gritó.

─ Harry ─ puse mi mano en su hombro.

Golpeo la pared tan fuerte que sus nudillos empezaron a sangrar. Cayó al suelo a llorar y gritó maldiciendo al mundo. Se quedó horas llorando y yo con él.

 

 

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