Requiem

Requiem


Lena

Página 24 de 45

Lena

Álex no ha regresado cuando Raven, Tack, Julián y yo volvemos a la casa de seguridad. Julián se ha recuperado e insiste en que puede andar, pero Tack, de todos modos, le pasa un brazo por los hombros. Julián camina de modo vacilante y sigue sangrando profusamente. En cuanto llegamos a la casa, Bram y Hunter charlan muy excitados sobre lo que ha sucedido, hasta que les lanzo la mirada más iracunda que puedo. Coral se asoma al umbral parpadeando con aire soñoliento, cubriéndose el estómago con un brazo.

Cuando terminamos de limpiar las heridas de Julián, Álex no ha vuelto.

—Rota —comenta Julián con voz espesa haciendo una mueca cuando Raven le pasa un dedo por el puente de la nariz. Y tampoco ha vuelto cuando todos, por fin, nos tumbamos en nuestros colchones con nuestras finas mantas y hasta Julián consigue dormir, respirando ruidosamente por la boca.

Cuando nos despertamos, Álex ya ha regresado y se ha ido de nuevo. Sus cosas no están, tampoco una botella de agua y uno de los cuchillos.

No ha dejado nada más que una nota, que encuentro pulcramente doblada bajo una de mis zapatillas.

La historia de Salomón es la única forma que conozco de explicarlo.

Y luego, con letra más pequeña:

Perdóname.

Ir a la siguiente página

Report Page