Louise

Louise


INTRODUCCIÓN

Página 3 de 53

 

 

INTRODUCCIÓN

 

 

 El otro día, mi prima de doce años, mientras yo estaba distraído, intentó leer el texto que aparecía en la pantalla del portátil, y yo, apartándola con cariño, le dije:

   —Anaís, no puedes  mirar  eso hasta que no esté terminado.

   —¿Por qué no puedo mirar?

   —Sí que puedes, pero no debes.

   —¿Y por qué?— me siguió preguntando.

   —Mira, Anaís, puedes coger un libro y abrirlo por detrás profanando su final, intentando descubrir los secretos que esconden sus últimas páginas. Puedes..., pero no debes.

   —¿Y por qué no debo primo?

   —¿Por qué? Porque  entonces estarías rompiendo la magia y nadie  quiere romper la magia, solo sentir su encanto.

 

 

 

Ir a la siguiente página

Report Page