Futu.re
XIX. Basil
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Tal vez, si le hubiera ayudado a huir, ahora estaría vivo. Se bañaría con su Chiara en el Pacífico, jugaría al fútbol con el hijo de ella o estaría dando vueltas con los dos por todo Bicoastal City en un descapotable. O quizá ya se habría separado de ella y se habría ido a Sudamérica a luchar junto con algunos guerrilleros y se habría enamorado de la hermosa hija de alguno de los caudillos revolucionarios locales.
No, no puede ser. ¡No puede ser! ¡No habría sido posible!
No se habría escapado.
Nadie puede escapar de ellos jamás.
Todo acabó como tenía que acabar.
En la trituradora.
Ele me dio permiso para no participar en la ejecución.