Crash

Crash


II. La crisis mundial » Capítulo 11. El G20

Página 26 de 61

En total, entre 2008 y 2010 el gasto para luchar contra la crisis ascendió a 1,87 billones de dólares o 2,4 billones en términos de PPA, contando solo el gasto discrecional y las medidas para reducir la presión fiscal. No fueron 5 billones de dólares, pero aun así no tenía precedentes históricos. Todavía más sorprendente fue la distribución del gasto. Cualquiera que fuera el modo de calcularlo, en 2009 y 2010 la respuesta más impresionante a la crisis fue la de Asia y los mercados emergentes. Rusia, Indonesia, Corea, Turquía, Brasil y Argentina estaban ahora en condiciones de poner en marcha medidas fiscales realmente sustanciales.56 Según las cifras del FMI, la repuesta discrecional de Rusia a la crisis en 2009 era más o menos equiparable a la de Alemania o la superaba en términos de PPA.57 Y estas cifras se quedaban muy cortas cuando se trataba del esfuerzo de China. No incluían el enorme boom crediticio. En comparación, pese al tamaño de la economía de la UE, la respuesta fiscal de Europa a la crisis fue irrisoria, apenas algo más del 10 % según el cálculo más generoso. Era una señal de lo que estaba por venir. El único estímulo fiscal occidental que se ponderó seriamente fue el que puso en marcha Estados Unidos.

Fuentes: Cálculos del autor a partir del FMI, «Update on Fiscal Stimulus and Financial Sector Measures», 26 de abril de 2009, junto con datos del PIB PPA del Proyecto Maddison, http://www.ggdc.net/maddison/maddisonproject/home.htm

Ir a la siguiente página

Report Page