Carnaval
CAPITULO X
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Lillie estaba sentada al lado de la chimenea, fumando un cigarrillo.
—Ya soy bailarina —le dijo Jenny.
—¿Dónde?
—En el Orient.
—Me parece que no te gustará.
—¿Y qué me importa? Si no me gusta puedo irme.
—Puedes, pero no lo harás. Todas las que entran en el Orient se quedan allí. Yo estoy hace doce años y todavía soy una chica de conjunto de la segunda fila. Tú también estarás allí dentro de doce años y como no engordes tendrás siempre el mismo puesto en la segunda fila de muchachos.
—¿Y si me caso?
—Es igual. Quedarás allí.
—Me estáis dando jaqueca tú y tus quedarás. Yo sólo quiero divertirme un poco. Eres peor que una semana de lluvia, chica, con tus pronósticos.
Hablaba Jenny de pie ante la ventana, contemplando la calle Cramboume, inundada por el sol de julio.
—Hace un calor terrible —observó Lillie.
—Me encanta el verano —contestó Jenny.