Carmina Burana

Carmina Burana


88

Página 41 de 154

88

<El juego del amor>

Poema muy elaborado con numerosas resonancias míticas y literarias en el que el amor se contempla fundamentalmente como juego amoroso sin llegar al quinto grado, es decir, la consumación, en la escala del amor. Cfr. 72, 2 y aquí mismo en la estrofa 8. Estrofas rítmicas con estribillo monorrimo (pero cfr. Vollmann, op. cit., pp. 1054-1055).

1

El amor domina a los dioses:

a Júpiter ama Juno;

dominando los mares fieros

se impone sobre Neptuno;

con él, Plutón, señor de los infiernos,

manso es como ninguno[194].

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar[195],

falto sin pecar.

2

El amor arrastra a los tiernos

con lazo de seda,

a los crueles y fieros

quiebra con dura fuerza;

cae cautivo el unicornio[196]

en los brazos de una doncella.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

3

Virgen entre vírgenes

aborrezco a las resabiadas

y lo mismo que a las meretrices

odio a las casadas,

pues en mujeres como éstas

el placer es una infamia.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

4

De una doncella egregia

en el fuego me quemo

y de día en día

en mi amor crezco;

el sol está en el mediodía,

pero yo no me templo.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

5

No hay nada más placentero

que retozar con una doncella,

pues su pecho

carece de toda hiel

y los besos que concede

más dulces son que la miel.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

6

Tonteo con Cecilia[197];

¡nada temáis!

Soy como el guardia

de su frágil edad,

para que no se marchiten los lirios

de su castidad.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

7

Es una flor. Tronchar una flor

no es cosa oportuna.

A la uva deja crecer

hasta que esté madura;

la esperanza me hace vivir

alegre por la felicidad futura.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

8

Sólo quiero juguetear,

esto es, contemplarte,

hablarte, tocarte

y, por último, besarte.

De lo quinto, que es actuar,

no se te ocurra ni sospechar[198].

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

9

Lo que hagan los demás,

doncella mía, así hagamos,

para que, como conviene,

el juego sigamos.

Ambos somos tiernos

tiernamente a jugar vayamos.

Estr. En amoroso bienestar

virgen soy y ella, doncella;

aro sin sembrar,

falto sin pecar.

Ir a la siguiente página

Report Page