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Un verano en chile

Cuando por fin llegó el verano pude sentir un poco el clima de mi país natal, puesto que estaba pasando la primavera y aproximándose el verano había una mezcla muy leve entre ambas mientras la primera iba en zoom out la segunda iba en zoom in lo que hacia el clima tropical, tal como mi país. Es divertido sentir como llega el verano después de haber tenido traumas con las olas de frío que hacía en primavera, ¡llegó el verano! Suspiré, se acabó el frio - dije tranquilamente. Sin saber que lo que venía era peor

Las temperaturas al principio eran relativamente similar a las de Venezuela así que me sentía relajado. Puesto que acá han experimentado temperaturas bajo 0, la mayoría anda en ropa muy corta, suave y descubiertas para aprovechar el calor, yo por otra parte estaba enfermo del frío porque aún quedaban aires primaverales, todos me miraban en el metro de forma rara, porque andaba bien cubierto, cualquier brisa suave para mí era terrible, mientras yo veía a los demás transpirando del calor , yo temblaba del frío.

A cabo de unas semanas me di cuenta porque no les afectaba esa suave brisa que me torturaba a mi. El calor fue aumentando y el verano paso de ser tropical a una especie de desierto, pero el más árido que puede existir, es terrible, desesperante, sofocante, provocó que mi cuerpo entrara en presión hasta agotar mi pulso, fue tanto el calor que cai al piso muerto de calor, no sabía cómo iba a sobrevivir a aquel mar que inundaba mi alrededor. En ese momento extrañe el insolente frío que azotaba mi cuerpo en primavera, al frío le hacía frente, y producía calor con mi ropa, pero a la insensata y árida ola de fuego ardiente que experimentamos todos los días en verano no podia combatirla.

Y pienso, y lo intente, dije: ok, hace mucho calor, la solución ropa descubierta y de tela suave, me visto cojo mi mochila y salgo... Moriiiiii el sol infernante se metía en mi piel, quemaba como si cada rayo uv fuera una línea delgada de fuego no podía salir así. Debía protegerme de tal atrosidad, y no encuentras manera alguna de ocultarte del sol, y pensé una solución: dije ya, salgo cuando baje el sol, pasaron horas y horas y el sol ahí como esperando a que yo saliera, fui a mi closet y busque el reloj me fijé en las manecillas del mismo y marcaban a las 8:30, me asombre, era increíble las 8 de la noche y el sol seguía ardiendo con tanta o más intensidad, extrañe mucho en ese momento cuando salía abrigado en primavera y era gratificante sentir calor pero a la vez un frío que entraba por la ropa suavemente dejando saber que el exterior estaba helado , hasta ahora he odiado el verano y no veo el momento cuando llegue su turno de hacer el zoom out y darlea bienvenida a la siguiente estación.

Pd; hay historia que me sucedió en verano.



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