Azul

Azul


Sonetos » De invierno

Página 32 de 39

D

E

I

N

V

I

E

R

N

O

EN invernales horas, mirad a Carolina.

Medio apelotonada, descansa en el sillón,

envuelta con su abrigo de marta cibelina

y no lejos del fuego que brilla en el salón.

El fino angora blanco, junto a ella se reclina,

rozando con su hocico la falda de Alençón,

no lejos de las jarras de porcelana china

que medio oculta un biombo de seda del Japón.

Con sus sutiles filtros la invade un dulce sueño;

entro, sin hacer ruido; dejo mi abrigo gris;

voy a besar su rostro, rosado y halagüeño

como una rosa roja que fuera flor de lis;

abre los ojos; mírame, con su mirar risueño

y en tanto cae la nieve del cielo de París.

Su ave es la venusina, la tímida paloma. Vencido hubiera en Grecia, vencido hubiera en Roma, en todos los combates del arte o del amor.

Ir a la siguiente página

Report Page