Faith

Faith


Capítulo 7

Página 9 de 23

C

a

p

í

t

u

l

o

7

Esto no era parte de mi plan. No era así como iban a ser las cosas. Ya debía haber tenido mi carta. Se suponía que ya habría pasado todo, y en vez de preocuparme por casarme con el Señor Bryson debería estar en un tren rumbo a Oklahoma.

Aún así, todo esto estaba sucediendo. Y si no se me ocurría otra cosa, muy pronto estaría caminando rumbo al altar.

No me moví de mi asiento. Estaba sentada allí, exprimiendo mi cerebro en busca de unan solución. ¿Cómo postergar la respuesta al Señor Bryson? No sabía cómo hacerlo sin provocar un escándalo. Después de todo, ¿cómo puede una chica rechazar a un hombre como él? Todos debían decir lo afortunada que era yo de que él haya puesto sus ojos en mí.

Además me visitó tantas veces como para que todos asumieran que tarde o temprano nos íbamos comprometer. Una vez que se supiera que no había tal compromiso, todos pensarían lo peor. Quizás se escaparon juntos. Quizás yo estaba embrazada y él no tuvo el suficiente valor para casarse conmigo. Quizás habría rumores peores que estos.

Parecía que no había otra solución. Estaba visto que sería la Señora Bryson y que viviría el resto de mi vida en un aburrido cautiverio.

Pero antes de que eso sucediera, había una última cosa que yo quería hacer. Me sequé los ojos y alise mis faldones. Era tiempo de visitar a la Señora Shelby.

Cuando la campanilla de su puerta tintineo, ella se sorprendió.

“¡Oh, Faith! No esperaba verte aquí tan pronto. Te acabo de ver ayer,” dijo.

“Lo sé,” dije, “pero quería revisar una última vez.”

Debió haber algo en mi voz, porque la Señora Shelby se detuvo y fijó su mirada en mí.

“Oh, querida, ¿pasa algo malo? No te ves muy bien. ¿Tienes algún problema?”

Sí, tengo un gran problema, pero no podía decirle eso a ella. Hice un gran esfuerzo para aparentar normalidad.

“¡No, no!” dije. “Sólo esperaba no irme con las manos vacías esta vez. ¡Eso es todo!”

La Señora Shelby sonrió. “Bien, pues ¡estás de suerte!”

Se dio la vuelta y revolvió entre una pila de cartas. No, no era posible. ¿O acaso sí?

Mi cabeza dio vueltas, y me sentí sin aliento mientras la observaba. Sin darme cuenta, se dibujó una sonrisa en mi rostro. Cubrí mi boca con mi mano y traté de controlar mis emociones.

Finalmente, la Señora Shelby volteó nuevamente hacia mí. Colocó un gran paquete frente a mí. Estaba envuelto en papel marrón y atado con hilo. Esto no era exactamente lo que yo esperaba.

“Aquí está,” dijo la Señora Shelby, “he estado guardando este paquete para tu madre, seguramente estará feliz de recibirlo.”

Mi desilusión fue enorme. Me sentí una tonta por emocionarme tanto. Desde luego que o era para mí.

“Gracias, Señora Shelby. Se lo llevaré inmediatamente,” le dije. Traté de que la decepción no alterara mi voz, pero fue difícil.

Entonces, la Señora Shelby sacó algo de su espalda. Era una pequeña y delgada carga. Con una letra algo áspera, alguien había destinado esta carta ‘A la Señorita Faith Walker,’ desde el Territorio de Oklahoma.

Cuando me la entregó, yo casi no podía creerlo. Había llegado finalmente.

“Has venido aquí con tanta regularidad que hasta yo me había vuelto impaciente,” dijo riendo la Señora Shelby.

Le di una vuelta a la carta. Había manchas de agua y pedazos de tierra en el sobre. Esperaba que el mensaje que guardaba aún fuera legible.

“Y ¿por qué es tan importante esta carta de Oklahoma? Seguramente me lo puedes contar ahora.”

Apreté la carta a mi pecho.

“Es sólo un mensaje de un amigo muy, muy querido,” le dije.

Me estiré sobre el mostrador y le di un fuerte abrazo a la Señora Shelby.

“¡Se lo agradeceré toda la vida,” le dije.

Y salí por la puerta antes de que se recuperara para despedirse de mí.

El camino a casa me pareció eterno. A cada paso que daba, sólo había una cosa en mi mente. Esta carta. ¿Qué diría? ¿Estaría de acuerdo?

Quería correr, dar brincos, saltar. En lugar de eso, caminé como una dama. Estaba segura de que en Oklahoma, a nadie le importaría si corría. Seguramente todos estarían muy ocupados luchando en la vida fronteriza como para fijarse en estas tontas reglas. Allá afuera, yo sería libre.

En casa, coloqué el paquete de Mamá en la mesa de la cocina y corrí a mí habitación. Una vez a solas, saqué mi carta.

Mis manos temblaban y mi corazón palpitaba contra mi pecho tan fuerte que estaba casi segura de que todos podían escucharlo. Deslicé mi dedo bajo el sello verde, tratando de no romper demasiado el papel.

Cuando desdoblé el papel, varias cosas salieron de ahí y cayeron al suelo. Me estiré a alcanzarlas y me sorprendió lo que vi.

Una de las cosas era una tarjeta. Parecía haber recibido el mayor daño por humedad de todos los artículos. El papel estaba arrugado y café. Pude ver que había querido ser un retrato, pero estaba casi totalmente dañado. Una oreja, mechones de cabello de color brillante. Eso era todo. Aún así, me hizo sentir más cerca de aquel hombre al otro lado de la carta.

Adherido al reverso de tarjeta de retrato había un trozo de papel rojo. Lo despegué delicadamente, pero parte de la tinta seguía pegada al papel húmedo. Aun así, fue fácil leer las palabras.

EXPEDIDO SUJETO A REGLAMENTOS Y HORARIOS DE LA COMPAÑÍA. SEGUNDA CLASE. PARA GUTHRIE, OKLAHOMA.

¡Un boleto! Si él me envió un boleto, seguramente significaba que estaba de acuerdo. Me apresuré a leer lo que había escrito. ¿Cómo se llamaba? ¿Por qué tenía una granja? Tenía tantas preguntas y esperaba que la carta las pudiera resolver.

Desafortunadamente, la mayor parte de la tinta se había corrido con la humedad. Sólo algunas palabras distribuidas en sitios secos aquí y allá eran legibles.

Ansioso – conocer – casarnos. Siento haber sido in– Esperando su lle–ada. – la espero en la – estación.

Lo leí como si fuera un código secreto, pero había entendido lo suficiente. Todo lo que necesitaba saber era que me iría a Oklahoma.

Cuando terminé de leer, doble la carta nuevamente. La escondí bajo mi almohada. Papá  pisaba fuerte por toda la casa, así que no era el mejor momento para darle la buena noticia. Esperaría a mañana.

Ir a la siguiente página

Report Page