Bikini

Bikini


SEGUNDA PARTE - Vuelo nocturno » 35

Página 40 de 133

35

Levon esperaba al teniente Jackson. Después de cinco minutos de musiquilla ambiental, le dijeron que el teniente le devolvería la llamada. Colgó y encendió el televisor —un enorme aparato de plasma que ocupaba media pared— para ver las noticias.

Primero proyectaron la relampagueante presentación gráfica de All Island News at Noon, con Tracy Baker y Candy Ko'alani. Luego Baker habló de la «modelo aún desaparecida, Kim McDaniels», presentando una imagen de Kim en bikini, y luego apareció el rostro de Jackson con la leyenda «en directo».

Hablaba a los reporteros frente a la comisaría.

—¡Barbara, ven! —llamó Levon, subiendo el volumen.

Su mujer a su lado en el sofá.

«Estamos interrogando a una persona relevante para el caso —decía Jackson—, y esta investigación continúa. Pedimos que nos llame cualquiera que posea información sobre Kim McDaniels. Se respetará la confidencialidad. Es todo lo que puedo decir por el momento».

—¿Han arrestado a alguien o no? —preguntó Barbara, aferrando la mano a su marido.

—Una persona relevante es un sospechoso. Pero no tienen suficientes pruebas, de lo contrario dirían que lo tienen retenido.

—Levon elevó el volumen un poco más.

«Teniente —dijo un reportero—, tenemos entendido que esa persona relevante es Doug Cahill».

«Sin comentarios. Esto es todo lo que tengo que decir. Gracias».

Jackson se alejó y los reporteros se agitaron. Tracy Baker volvió a la pantalla.

«Doug Cahill, defensa de los Bears de Chicago —dijo—, ha sido visto en Maui y fuentes bien informadas dicen que fue amante de Kim McDaniels».

En la pantalla apareció una foto de Doug ataviado con el equipo de su club, el casco bajo el brazo, una ancha sonrisa, el pelo rubio cortado a cepillo, guapo al estilo huesudo del Medio Oeste.

—Me consta que la molestaba —dijo Barbara, mordiéndose el labio inferior, arrebatándole el mando a distancia a Levon para bajar el volumen—, pero ¿hacerle daño? No lo creo.

Sonó el teléfono. Levon atendió.

—Señor McDaniels, soy el teniente Jackson.

—¿Piensa arrestar a Doug Cahill? En tal caso, comete un error.

—Hace una hora apareció un testigo, un lugareño que pasaba por allí y dice haber visto a Cahill acosando a Kim después del rodaje.

—Pero Doug dijo que no había visto a Kim…

—En efecto. Pero quizá nos mintió, así que lo estamos interrogando. Todavía niega toda participación.

—Hay alguien más sobre quien usted debería saber —dijo Levon, y le refirió la reciente llamada de Hawkins concerniente a una pista sobre un empresario internacional llamado Nils Bjorn.

—Sabemos quién es Bjorn. No nos consta ningún vínculo entre Bjorn y Kim. No hay testigos. No hay nada en las cintas de vigilancia.

—¿Usted habló con él?

—Bjorn se marchó antes de que nadie se enterase de la desaparición de Kim. McDaniels, sé que usted no lo cree así, pero Cahill es nuestro hombre. Sólo necesitamos tiempo para que confiese.

Ir a la siguiente página

Report Page