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Análisis: Mientras Georgia vota, Trump intenta destruir la fe de Estados Unidos en la democracia .

Desesperado, engañoso y peligroso, el presidente Donald Trump llevó a Estados Unidos más profundamente en un abismo político el lunes por la noche, en su esfuerzo por robar una elección que perdió y destruir la fe en la democracia que lo expulsó de su cargo.

El presidente espetó mentiras, teorías de conspiración y afirmaciones absurdamente falsas de fraude electoral ante una multitud enojada en Georgia, en un viaje programado para apoyar a dos republicanos en la segunda vuelta que este martes sellará el equilibrio de poder en el Senado.

Pero como de costumbre, y como ha sido durante los últimos cuatro años, incluso durante el rápido crecimiento de la pandemia que ignoró, la principal preocupación del presidente saliente era él mismo.

"Por cierto, no hay forma de que hayamos perdido a Georgia, fue una elección amañada", dijo Trump en las primeras palabras inexactas que salieron de su boca después de desembarcar de su helicóptero Marine One, antes de ampliar su desinformación sobre las elecciones del 3 de noviembre.

"Cuando uno gana de manera aplastante y lo roban y está amañado, no es aceptable", expresó Trump en su discurso amargado, arraigado en afirmaciones falsas de que prevaleció en una elección que el presidente electo Joe Biden ganó con 306 votos frente a 232 en los colegios electorales.

Aunque a menudo incluía a los senadores republicanos Kelly Loeffler y David Perdue en sus comentarios -y advirtió sobre los peligros de un monopolio demócrata del poder en Washington si perdían-, la apariencia del presidente fue esencialmente salvaje en el escenario, en horario de máxima audiencia. Versión de la llamada del sábado en la que se apoyó en los funcionarios del estado de Georgia para conjurar votos de la nada con el fin de desacreditar la ya certificada victoria de Biden en Peach State, un abuso de poder flagrante y posiblemente ilegal.

Las peroratas del presidente el lunes por la noche contrastaron marcadamente con la sorprendente denuncia punto por punto de su caso por parte de un alto funcionario electoral del Partido Republicano que utilizó hechos y pruebas para desestimar las acusaciones falsas de corrupción electoral.

"Todo esto es fácil, demostrablemente falso. Sin embargo, el presidente persiste", dijo el lunes Gabriel Sterling, gerente de implementación de sistemas de votación de la oficina del secretario de estado de Georgia, en una tranquila y razonada conferencia de prensa.

Trump se creó una imagen de pesadilla de un comandante en jefe demagógico y despotricado, revolcándose en fantasías más allá de la política, una perspectiva aterradora ya que ostentará los poderes de la presidencia durante otros 15 días.

Pero no explicó cómo exactamente planeaba revocar el proceso constitucional que convertirá a Biden en presidente, una omisión que reforzará la impresión de que está haciendo todo lo posible para derribar la fe de Estados Unidos en la democracia en un acto final de venganza. . Fuente: CNN .